Autoridades del Servicio Médico Forense (Semefo) de Puebla confirmaron que, tras la muerte de María de Jesús Mundo, la anciana que pasó sus últimos años esperando a sus familiares en la Central de Autobuses de Puebla (CAPU), una de sus hijas se presentó a identificar el cuerpo
La mujer de 79 años falleció el pasado 24 de julio de 2025 y su cuerpo fue localizado sobre una de las bancas de la terminal, el mismo lugar que habitó desde 2022, mientras esperaba que alguno de sus tres hijos –Alma, Marina y Víctor– acudiera por ella.
Cinco días después de su muerte, una mujer procedente de Cuernavaca, Morelos, quien se identificó como su hija, presentó la documentación correspondiente ante las autoridades para reclamar sus restos y confirmar el parentesco.
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¿Quién era Doña María?
Originaria de la Ciudad de México, María de Jesús llegó a Puebla hace 38 años, donde residió un tiempo en Tehuacán, pero en el 2022, tras ser desalojada de su vivienda, sus conocidos la trasladaron a la CAPU, asegurándole que una de sus hijas ya la buscaría.
Desde entonces, ocupó una banca en la terminal, donde sobrevivió gracias a la caridad de usuarios que le ofrecían comida, ropa y productos de higiene.
A pesar de los intentos de las autoridades e instituciones de asistencia social por llevarla a un albergue, la mujer se negó a dejar la central.
“Si me muevo de aquí, mis hijos nunca me van a encontrar”, solía decir, según testigos.
Durante tres años, la presencia de María de Jesús se volvió familiar para usuarios y trabajadores de la CAPU, quienes lamentaron su fallecimiento.
Ahora, con el reclamo formal del cuerpo por parte de su hija, la historia de la mujer que esperó en vano a su familia cierra un capítulo que deja en evidencia la vulnerabilidad de muchas personas adultas mayores en situación de abandono.