Una trágica expedición culminó este fin de semana cuando rescatistas locales hallaron el cuerpo sin vida de Paolo Sánchez, el joven de 14 años que desapareció el 12 de julio tras aventurarse solo en el volcán Iztaccíhuatl. Alfonso Zamorano, rescatista, contó cómo fueron las maniobras hasta encontrar a la víctima.
La desesperada búsqueda
El operativo de rescate, liderado por Alfonso Zamorano de la Brigada de Rescate del Socorro Alpino de México, inició el jueves pasado, cuando las autoridades fueron alertadas sobre la desaparición del adolescente.
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Testigos reportaron haber visto a Paolo caminando solo por diversas zonas del parque. El sábado por la mañana, los equipos de rescate ascendieron siguiendo posibles rutas.
Finalmente, lo encontraron a más de 4,000 metros de altura, cerca de una pared de piedra conocida como "Amacuilecatl", en una zona de alto riesgo por las bajas temperaturas y la falta de oxígeno.
Condiciones extremas y falta de equipo
Zamorano explicó que el lugar donde hallaron a Paolo es peligrosamente frío y ventoso, con temperaturas que en días recientes alcanzaron los -6°C.
"La temperatura allá arriba cambia en dos minutos. Puede granizar o convertirse en un riesgo serio", relató el rescatista.
Además, confirmaron que el joven no llevaba equipo adecuado para la travesía, lo que probablemente aceleró su deterioro físico.
Un final doloroso, pero con dignidad
Aunque el desenlace no fue el esperado, los rescatistas destacaron la importancia de haber localizado y recuperado el cuerpo para entregarlo a su familia.
"Nos afectó mucho encontrarlo solo, sin equipo, en esas condiciones. Pero cumplimos con nuestro deber de regresarlo a los suyos", expresó Zamorano.