La idea de tener más tiempo para la familia, para el descanso o incluso para emprender un proyecto personal está más cerca de convertirse en realidad para millones de trabajadores mexicanos.
Y es que el Gobierno Federal, a través de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), ya comenzó a delinear los primeros pasos para implementar una jornada laboral de 40 horas semanales, en sustitución del actual esquema de 48 horas.
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Menos horas, más bienestar
Uno de los factores más valorados por los empleados actualmente es la flexibilidad en sus horarios. Esta transición responde precisamente a esa necesidad: lograr un mayor equilibrio entre la vida laboral y personal, sin afectar la productividad.
Según la Ley Federal del Trabajo, actualmente existen tres tipos de jornadas:
- Diurna, de 6:00 a 20:00 horas (máximo 8 horas al día)
- Nocturna, de 20:00 a 6:00 horas (máximo 7 horas)
- Mixta, que combina ambas, sin exceder las 7.5 horas
La jornada semanal de 40 horas se irá implementando gradualmente, con una meta fijada para enero de 2030. Esto significa que año con año se irán “recuperando” horas laborales que podrán ser aprovechadas por los trabajadores a su conveniencia.
¿Cómo se construirá esta reforma?
Para garantizar que la transición sea justa y viable, se organizarán foros regionales de diálogo del 19 de junio al 7 de julio de 2025. En estos encuentros participarán empleados, empresarios, sindicatos, académicos y organismos internacionales.
Las sedes de estos foros serán:
- Ciudad de México
- Nuevo León
- Jalisco
- Baja California
- Querétaro
- Quintana Roo
Una reforma con visión de futuro
El titular de la STPS, Marath Bolaños, afirmó que esta medida busca dignificar el trabajo y mejorar la calidad de vida. Se espera que esta reducción horaria también tenga impactos positivos en la salud mental, la productividad y la cohesión familiar.
Aunque la transformación será gradual, ya está en marcha el proceso que podría cambiar para siempre la forma de trabajar en México.