La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reveló que, tras el retiro anticipado del presidente estadounidense Donald Trump de la Cumbre del G7, ambos sostuvieron una llamada telefónica de 20 minutos, en la que abordaron temas clave como migración, seguridad y comercio.
Durante su participación en la conferencia matutina, Sheinbaum afirmó que Trump se disculpó por no poder permanecer en la cumbre debido a la escalada del conflicto en Medio Oriente, y le propuso reunirse en una escala en Washington, aún en definición.
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También subrayó la importancia del reconocimiento a los connacionales mexicanos en territorio estadounidense, un tema que consideró prioritario en el diálogo bilateral.
“Le planteé por qué no tenemos un acuerdo general que tuviera que ver con seguridad, migración y comercio. Ahí mismo le mencioné la importancia de reconocer a los mexicanos en Estados Unidos, familias mexicanas que llevan años viviendo, que trabajan por Estados Unidos, me dijo, es cierto. Él estuvo de acuerdo”, detalló Claudia Sheinbaum.
Reuniones multilaterales fortalecen la imagen de México
La presidenta destacó que durante su participación en el G7 sostuvo productivos encuentros con los jefes de gobierno de Canadá, India, Alemania, Corea del Sur, Brasil y representantes de la Unión Europea. El objetivo principal fue fortalecer relaciones diplomáticas, cerrar acuerdos de inversión y posicionar a México como un socio estratégico confiable.
“México es muy bien recibido. Hay interés creciente en colaborar con nosotros”, afirmó Sheinbaum.
México, propuesto como sede de la Cumbre Económica para el Bienestar
En la sesión plenaria del G7, México propuso organizar la “Cumbre Económica para el Bienestar”, una iniciativa que buscará reunir a los países miembros del G7 y otros actores globales para impulsar proyectos conjuntos de desarrollo sostenible e inclusión económica. Aún no se ha definido la fecha del evento.
La mandataria también agradeció el cálido recibimiento de la comunidad mexicana en Vancouver y confirmó que empresarios canadienses manifestaron gran interés en invertir en México en sectores como infraestructura, tecnología y energía limpia.
Con el Banco Mundial, no se solicitaron préstamos, sino proyectos de colaboración técnica y financiera, alineados con la estrategia nacional de bienestar y transformación.