En una posición que enfrenta directamente a la iniciativa inmigrante del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, afirmó su compromiso para defender a los migrantes.
"Los queremos, nos preocupamos por ustedes. En la Ciudad de Minneapolis los defenderemos, y haremos todo lo que esté a nuestro alcance para ayudarles; porque no eres un extranjero en nuestra ciudad, eres un vecino", afirmó Jacob Frey a los medios.
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En una conferencia de prensa, el alcalde aseguró que la policía local no indagará sobre el estatus migratorio de las personas ni colaborará con los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) para las deportaciones masivas que existen actualmente.
“Nuestros agentes de policía no cooperarán con las autoridades federales en torno a la ley federal de inmigración. Hacemos cumplir las leyes estatales y locales aquí en Minneapolis, y haremos lo mejor que podamos. Pero en cuanto a la cooperación con ICE, la respuesta es no”, reiteró su posición, Frey.
Refugio para migrantes en Estados Unidos
Minneapolis ha establecido una política de “ordenanza de separación” que prohíbe a los funcionarios locales y a la policía recabar datos sobre el estatus migratorio de los habitantes del estado, con lo que se protege a los migrantes indocumentados de redadas y deportaciones.
Por lo anterior, Minneapolis se ha constituido como un refugio de resistencia, enfrentando directamente la política de Donald Trump, la cual firmó varias órdenes ejecutivas para aumentar la seguridad en la frontera sur, que incluye la reactivación de la política de “Permanecer en México” y la eliminación del uso de la aplicación CBP One por parte de los migrantes, muchos de ellos centroamericanos.