El bochorno no da tregua en Nuevo Laredo se enfrenta a una jornada sofocante: el termómetro alcanzará los 37°C, pero con una humedad del 52%, la sensación térmica podría ser mucho más alta. Y por si fuera poco, el cielo parcialmente cubierto no ofrecerá el alivio esperado.
Los vientos del sureste no llegarán como un respiro. Más bien, se convertirán en un nuevo reto, con velocidades de 15 a 30km/h y ráfagas que podrían rozar los 40km/h durante la tarde.
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Esto provocará posibles tolvaneras en algunas zonas, por lo que se recomienda evitar actividades al aire libre sin protección adecuada.Al caer la noche, la ciudad no encontrará consuelo. La temperatura mínima será de apenas 25°C, con una humedad que escalará hasta el 64%, generando un ambiente pegajoso e incómodo.
El aire seguirá moviéndose con fuerza: las ráfagas nocturnas podrían mantenerse entre 25 y 40km/h, dificultando la visibilidad y acentuando la incomodidad térmica.
Dormir con el ventilador encendido será casi obligatorio. Las noches cálidas se han vuelto constantes en la región, impidiendo un descanso verdaderamente reparador.
Prepárate para un día dominado por el calor extremo, la humedad intensa y los vientos persistentes. Hidrátate bien, limita la exposición al sol y no subestimes el poder de un clima que, literalmente, te puede dejar sin aliento.