Cientos de familias aprovecharon el “puente escolar” para tomarse unos días y pasarlos de compras o de paseo en Texas. Como consecuencia, los dos puentes para vehículos ligeros de Nuevo Laredo lucieron llenos.
En Nuevo Laredo, el Puente Juárez-Lincoln lució todo el día con filas, pero por la mañana y antes del mediodía alcanzaron la zona de los semáforos del bulevar Luis Donaldo Colosio y la calle Hidalgo. Reportes de los usuarios dijeron que tomaban poco más de una hora para cruzar hacia Laredo, Texas, aunque a ratos se hacía más tiempo.
Las largas filas causaron también algunos inconvenientes. Por ejemplo, por la tarde hubo un intercambio de insultos entre una mujer que manejaba una pequeña SUV y un hombre en una pick-up, que se le metió por la fuerza, luego de brincarse el camellón de la avenida 20 de Noviembre, antes San Antonio. Sin embargo, pese a los reclamos de la mujer, el hombre de la camioneta decidió ignorarla y no pasó a mayores.
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La fila del carril de autopago era de las más largas y así se mantuvo durante casi todo el día. Por la tarde, cerca de las 3:00, las filas se redujeron un poco, lo que aprovecharon algunos neolaredenses para cruzar por el Puente II, como se le conoce popularmente al Juárez-Lincoln.
“Hay que aprovechar el día de asueto”, dijo Israel Méndez, quien hacía fila en el carril de Telepeaje, como se le conoce al autopago. Y es que la mayoría de los vehículos que cruzaron antes del mediodía eran de Nuevo León y Coahuila, que decidieron venirse a Nuevo Laredo para cruzar a Laredo e ignorar el puente de Colombia, pues allá les cobran el doble. En el puente Uno no se formaron largas filas, pues está dedicado al carril SENTRI y el cruce es muy rápido casi siempre