Si hay un electrodoméstico práctico e indispensable en las cocinas mexicanas es, sin lugar a dudas, el horno de microondas. Para hacer correcto uso de él, y evitar que consuma más energía de la prevista, sigue estos tips difundidos por la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
La CFE identifica al microondas como un aparato de consumo fantasma. “Aunque no lo uses, tu microondas sigue consumiendo energía si está conectado”. La recomendación es básica: “desconéctalo cuando no lo necesites y ayuda a reducir tu recibo de luz”.
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Los electrodomésticos con consumo fantasma son todos aquellos que están en modo ‘stand-by’, es decir, en espera para usarse. Aunque no estén en funcionamiento, estos siguen alimentándose de electricidad de manera silenciosa. Un modo de identificarlos es ver si tiene ‘lucecita’ de encendido o apagado; los microondas solían tener reloj.
El gasto fantasma es mínimo, pero a la larga y con la suma de otros aparatos electrónicos, puede acumular un costo innecesario en el recibo de luz de la CFE. Desconectarlos puede mejorar la economía de la casa y, a su vez, cuidar el medio ambiente.
¿Qué otros tips hay para ahorrar al usar el microondas?
Hay otros consejos que puedes seguir para evitar que el horno de microondas se convierta en un martirio en el recibo de la CFE. El primer tip, que curiosamente es una práctica muy común: no abras o detengas el aparato antes del tiempo que elegiste. Esto debido a que ‘interrumpe’ el ciclo natural y termina por exigir más potencia para alcanzar su temperatura ideal.
Otra máxima para mejorar el uso del microondas es cortar los alimentos, pues así se calienta de mejor manera. De este modo, puedes evitar usarlo dos o más veces para que la comida esté en perfectas condiciones. Por último, la limpieza constante también es clave para que ningún componente esté condicionado por la suciedad o residuos.