El peso mexicano continúa su batalla contra el dólar estadounidense en un contexto internacional marcado por volatilidad e incertidumbre.
Este sábado 12 de julio de 2025, la moneda nacional arrancó la jornada con el tipo de cambio en 18.64 pesos por dólar, una cifra que representa una ligera ventaja para la divisa norteamericana, aunque sin revertir la tendencia bajista acumulada durante los últimos meses.
Intenta superpeso domar al dólar
El entorno macroeconómico mundial ha sido sacudido por diversas tensiones: el endurecimiento de los vínculos comerciales entre Washington y Brasil, la creciente fricción diplomática con Medio Oriente, y la reciente aprobación de la polémica reforma tributaria “BBB” en el Senado de Estados Unidos, impulsada por la administración Trump.
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Estas variables han reconfigurado los flujos financieros internacionales y han debilitado la percepción de fortaleza del dólar.
En este tablero geoeconómico, México se posiciona como un actor principal por su papel estratégico en el comercio regional. El comportamiento del tipo de cambio responde no sólo a factores internos, sino también a decisiones externas que alteran las rutas comerciales y los escenarios de inversión.
Las nuevas reglas arancelarias han influido en la percepción de riesgo sobre América Latina, lo que ha provocado movimientos en los mercados cambiarios que benefician, aunque con matices, al peso mexicano.
Peso, con capacidad de adaptación
El valor del dólar sigue siendo un indicador fundamental para múltiples sectores de la economía mexicana. Desde las importaciones tecnológicas hasta el costo de insumos básicos, la cotización diaria impacta a consumidores, empresarios y autoridades financieras por igual. Las remesas, pilar de millones de familias mexicanas, también están atentas a cada fluctuación del billete verde.
Pese a los altibajos y a los nubarrones en el panorama internacional, el peso mexicano reafirma una capacidad de adaptación. En esta jornada sabatina, aunque no logra imponerse del todo, mantiene su posición firme, intentando una vez más darle un nuevo "sabadazo" al dólar en el cambiante ajedrez económico del 2025.