SEQUÍA EN MÉXICO

Carnes asadas: por este motivo podría terminarse este suculento platillo norteño

El sector productivo lanza la advertencia de una industria que en el corto plazo podría entrar en una severa crisis

Uno de los factores es la poca producción de forrajes
Uno de los factores es la poca producción de forrajesCréditos: Especial
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La crisis del agua que azota desde hace un tiempo a gran parte de la República Mexicana, sin duda cobra factura a cualquier actividad humana, tal vez pocos imaginarían que las carnes asadas se encuentra en riesgo por la extrama sequía. 

Las carnes asadas son un platillo tradicional en los estados del norte de México, son el pretexto ideal para los convivios entre familiares y amigos, pero ahora corren un gran riesgo ante el estrés hídrico que se vive el país.

La Asociación Mexicana de Productores de Carne ha alertado sobre una latente crisis en el sector cárnico, debido a que México no ha logrado salir de una grave sequía que cada vez se extiende más. De acuerdo con el Monitor de la Sequía de México realizado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las zonas centro y sur de país padecen un 84.4 por ciento de sequía; en el norte se estima que un 71.5 por ciento de territorio vive una crisis del agua.

El mismo estudio arroja que los estados de Aguascalientes, Durango, Sonora, Tamaulipas, así como la Ciudad de México, son las zonas afectadas.

Así afecta la sequía a la comercialización de carne

Ante la ausencia de lluvias suficientes, además del campo, otro sector duramente golpeado es el ganadero, pues de inmediato disminuye la producción de forraje, un alimento clave para las reses. Ante esta situación, algunos ganaderos han optado por vender sus cabezas de ganado a la industria lechera. Además, por si fuera poco, hay una tendencia a una menor cantidad de ejemplares de crianza o becerros.

Enrique López, un alto dirigente de la Asociación Mexicana de Productores de Carne, advierte que los productores están muy preocupados, ya que este decremento en la población de reses afectaría la oferta de becerros en uno o dos años en todo el país; por consiguiente, habría menor disponibilidad y aumentarían los precios de la carne.

El mismo dirigente informó que en estados como Sonora y Nuevo León ya están impulsando estrategias para evitar despoblamiento del ganado. Además, reveló que existen conversaciones con instancias del gobierno federal, así como representantes del congreso, para buscar presupuestos incentivar la producción ganadera.