CONAGUA

Se acaba la sequía, pero hay poca agua; presa La Amistad está al 34 por ciento

Por primera vez desde agosto del 2021, Nuevo Laredo está considerado “sin sequía” por el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA)

Escrito en NUEVO LAREDO el

Luego de casi de dos años de estar clasificado en alguna de las escalas de sequía desde moderada hasta severa e incluso excepcional, por primera vez desde agosto del 2021, Nuevo Laredo está considerado “sin sequía” por el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).

Si bien lo anterior se traduce en que los campos se vieron beneficiados con las lluvias de los meses pasados, se vive otra crisis relacionada al agua en la región, pues la Presa encargada del suministro del vital líquido en la ciudad, se encuentra a una tercera parte de su capacidad de almacenamiento.

LA AMISTAD, A UNA TERCERA PARTE

Mientras que el panorama del suelo en Nuevo Laredo y los alrededores ha tenido un respiro con las lluvias de los meses pasados, las presas La Amistad y Falcón, se han visto también favorecidas por las precipitaciones anteriores, aunque en menor medida.

La presa La Amistad, que surte a los dos Laredos de agua comenzó el año con el 46 por ciento de su capacidad, lo que le permitió garantizar el abasto para el consumo humano y hasta uso agrícola en las comunidades que dependen del embalse, durante el primer trimestre del año no tuvo mayores variaciones, pues a finales de marzo solo había descendido hasta el 43 por ciento, sin embargo a finales del mismo mes, con el inicio del trasvase comenzó también su descenso gradual, que ha llegado -hasta ayer- al 34 por ciento de su capacidad.

Aunque puede considerarse bajo, este es suficiente para garantizar el consumo humano para el resto del año, sin embargo las autoridades locales llaman a ser mesurados, evitando el desperdicio pues la demanda ha aumentado drásticamente en la temporada de calor.

Por otro lado la presa Falcón, beneficiada por los trasvases de La Amistad en conjunto con una serie de lluvias que llegaron en la región de los dos Laredos y municipios vecinos, pasó del 12 por ciento al 24 por ciento en el lapso de aproximadamente un mes y medio, es decir, se duplicó, brindando de esta manera un respiro a las comunidades ubicadas al sureste de los dos Laredos, que dependen de este último embalse.