Como un digestivo, para acompañar una bebida o incluso por el mero gusto, las bebidas carbonatadas (o refrescos) son muy solicitadas al momento de comer o en fiestas donde el alcohol será una constante. Pero, contrario a lo que creías, muchas de ellas no cumplen con los estándares de calidad y podrían generar adicción.
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Para ofrecer el mejor productos a los mexicanos, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) llevó a cabo un estudio para determinar cuales son las bebidas carbonatadas que no cumplen las normas, reprobando las pruebas a las que fueron sometidas en el sentido de la calidad.
La dependencia analizó 46 refrescos, revisando su contenido neto, la cantidad de azúcares, calidad sanitaria, el contenido energético, la información al consumidor, así como la presencia de cafeína.
Bebidas que no aprobaron
De las 46 marcas, tres reprobaron los análisis del organismo regulador, indicando que estas no pueden llamarse a sí mismas "bebidas carbonatadas" por su baja calificación, además de presentar jarabe de maíz de alta fructosa, un edulcorante sumamente barato y dañino para el consumo regular, pues genera adicción.
"Recuerda que el Jarabe de Maíz de Alta Fructosa (JMAF) se asocia con que la persona que lo consume no siente saciedad al momento de ingerir un alimento o bebida que lo contenga, por lo que sigue comiendo", se indica en la Revista del Consumidor.
Dichas marcas son:
- Jumex naranjada Frutzzo (bebida carbonatada mineralizada sabor naranja de 600 ml): incumplió la NOM-002-SCFI-2011 debido a que una unidad declaró 600 mililitros (mm) de contenido neto, pero contiene 582 ml.
- Sangría Señorial (bebida carbonatada sabor Sangría): incumplió la NOM-051-SCFI/SSA1-2010 por señalar que contiene fructosa cuando realmente presentó Jarabe de Alta Fructosa, además de que dice cumplir con a NOM 218 y no lo demostró.
- Sangría Señorial Light (bebida carbonatada sabor Sangría sin azúcar de 600 ml): incumplió con la NOM-051-SCFI/SSA1-2010 al decir que cumplía con la NOM 2018 y no demostrarlo.