Con abrazos fraternales y mensajes de paz y unidad, los dos Laredos enviaron un poderoso mensaje a Washington D.C., reiterando que el futuro de Estados Unidos y México sólo se puede construir juntos.
La ceremonia realizada ayer sábado a mitad del Puente Internacional Juárez-Lincoln como parte de los festejos del 127 aniversario del Natalicio de George Washington, fue la oportunidad perfecta para que los dos Laredos pusieran ejemplo a nivel nacional de la importancia de enfrentar juntos los retos que se presenten.
Tanto el obispo James Tamayo, como la jueza federal Diana Saldaña y el diputado estatal Richard Peña Raymond, ofrecieron mensajes de paz, de esperanza y de unidad entre dos naciones que son hermanas. Como orador especial del evento, Peña Raymond destacó la importancia de hacer historia a través de los abrazos.
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Mencionó que el 2025 traerá muchos cambios en todo el mundo, pero muy en especial en las relaciones entre México y EU. “Tenemos que reconocer nuestras fortalezas y nuestras debilidades como naciones y construir sobre las fortalezas y usarlas sobre las debilidades”, indicó.
El legislador estatal afirmó que las historias de los dos países no se pueden escribir el uno sin el otro, y también el futuro no se puede definir sin estar unidos.
“Gracias a Dios que tenemos esta ceremonia tan especial y simbólica que es tan importante porque tiene un significado muy grande y poderoso, es el símbolo del trabajo juntos para enfrentar los retos que vienen”, precisó.
La Ceremonia del Abrazo fue encabezada por los niños Zelie Evangelina Martínez y Rodrigo Neira por Estados Unidos y representando a México, María Fernanda García y Tiago X. Fernández.
Otro abrazo de gran representación fue el que se dieron el mayor Víctor Treviño, de Laredo, y la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas, de Nuevo Laredo, acompañados del juez del Condado de Webb, Tano Tijerina; de Oscar Mario Hinojosa y de Rosa Márquez de Treviño.