Lo que comenzó como una aventura de caza en Sudáfrica terminó en tragedia para Asher Watkins, un agente inmobiliario de 52 años especializado en la venta de ranchos de lujo en Texas. El empresario, socio gerente de la firma Watkins Ranch Group, falleció el pasado domingo 3 de agosto tras ser embestido por un búfalo de 1,300 kilos mientras rastreaba al animal durante un safari en la provincia sudafricana de Limpopo.
Watkins participaba en una expedición organizada por Coernraad Vermaak Safaris, una firma con amplia experiencia en safaris de caza.
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De acuerdo con declaraciones al diario The Daily Mail, el ataque fue “repentino y no provocado”, y dejó heridas mortales que terminaron con su vida antes de que pudiera recibir ayuda. Hunter Hans Vermaak, representante de CV Safaris, así lo declaro.
Con profunda tristeza y pesar confirmamos la trágica muerte de nuestro cliente y amigo Asher Watkins.
La noticia también fue confirmada en redes sociales por su ex esposa, Courtney Watkins, en una publicación que posteriormente fue eliminada. “Nos duele profundamente pensar en el futuro, especialmente por Savannah, que está de luto por su padre”, escribió en referencia a su hija.
Criado en Dallas, Watkins pasó su infancia en el rancho ganadero de su familia. Más tarde, fundó una exitosa firma inmobiliaria afiliada a Briggs Freeman Sotheby’s International Realty, desde donde gestionaba ventas de propiedades ganaderas valuadas hasta en 46 millones de dólares.
Amante de la vida al aire libre, Watkins era un cazador entusiasta y miembro activo de organizaciones como Ducks Unlimited, el Dallas Safari Club y la American Association of Professional Landmen. Estudió en la Universidad de Baylor y a lo largo de su vida combinó su pasión por el campo con los negocios.
Su repentina muerte ha conmocionado tanto a su familia como a la comunidad del sector inmobiliario y de caza deportiva. Las autoridades sudafricanas no han dado a conocer más detalles sobre el incidente.