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Texano podría pasar 5 años en prisión por escribirle esto a Trump por Facebook

El caso pone en evidencia los límites de la libertad de expresión en redes sociales cuando las amenazas de violencia entran en juego

Escrito en GLOBAL el

Robert Herrera, un hombre de 52 años residente en el condado de Bexar, Texas, utilizó Facebook para expresar su descontento con el presidente Donald Trump. 

Lo que comenzó como un comentario en el perfil de la televisora local KSTA se tornó en un caso legal de alto riesgo cuando escribió “No fallaré” junto a una imagen de Trump, tomada tras un atentado frustrado semanas antes en Pensilvania.

La situación escaló cuando otro usuario lo confrontó en la misma plataforma. Herrera respondió con un mensaje más directo: “Voy a por ti”, acompañado de una fotografía de un rifle de asalto con varios cargadores. Este acto llamó la atención inmediata de las autoridades, pues la publicación fue considerada una amenaza seria y concreta hacia la seguridad del presidente.

Tras la investigación del FBI, Herrera se declaró culpable en una corte federal. De acuerdo con el Departamento de Justicia, podría enfrentar hasta cinco años de prisión y una multa de 250,000 dólares, aunque la sentencia final aún está pendiente. El caso subraya la línea legal que existe entre la libertad de expresión y las amenazas de violencia.

El FBI en San Antonio destacó que respalda plenamente la libertad de expresión de todos los ciudadanos, pero recalcó que las amenazas de violencia no están protegidas por la Constitución y constituyen un delito federal. 

Este caso sirve como recordatorio de que, aunque las redes sociales son espacios de opinión, ciertas expresiones pueden tener consecuencias legales graves cuando ponen en riesgo la seguridad de otros, especialmente de figuras públicas de alto perfil.

Más allá del impacto legal, el caso ha generado debate sobre los límites de la expresión en línea y la responsabilidad de los usuarios al interactuar en plataformas digitales, demostrando que un simple comentario puede escalar hasta convertirse en un caso federal de alto perfil.