Las nuevas políticas de inmigración de Estados Unidos ya no buscan deportar a los indocumentados, sino que han declarado la ilegalidad como crimen; ante ello, el presidente Donald Trump ha diseñado distintos instrumentos para dar continuidad a sus planes de gobierno.
Además de buscar ante el Senado que la ciudadanía por derecho de nacimiento sea revocada de la Constitución para los hijos de migrantes ilegales; también ha inaugurado un nuevo centro de detención en Florida, el cual fue colocado junto al sistema ecológico Everglades, una zona pantanosa de Florida y hábitat de la fauna de caimanes de la región.
"Alligator Alcatraz" y sus precarias instalaciones
Donald Trump y Kristi Noem, secretaria del Departamento de seguridad del Estado, junto con el gobernador de Florida inauguraron esta semana el nuevo centro de detención para migrantes junto a los Everglades de Florida.
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En lo que anteriormente era una pista de aterrizaje fueron colocadas cabinas 'temporales' que, desde arriba, parecería un estacionamiento de casas rodantes; sin embargo, su objetivo está muy lejos de ser definido como un lugar de descanso.
En cada bunker de acero se han colocado pares de camas individuales rodeados de una valla metálica en espacios de 4 x 2 metros y agrupando hasta 6 cubículos uno junto al otro, sin espacio para caminar alrededor de cada cama. El búnker supuestamente estará climatizado y tendrá luz y agua corriente, aunque se ignora la cantidad de baños que habrá para el total de prisioneros.
"Alligator Alcatraz" fue construido para contener más de 5 mil prisioneros y el mandatario nacional se ha jactado ante los medios que los detenidos serán inmigrantes. Si desean escapar "no corran derecho, hagan esto", expresó en forma burlona mientras movía su mano en zigzag.
Los tres servidores públicos dieron el visto bueno al enrejado instalado en cada búnker y al alambrado de picos que forma parte de las medidas físicas de seguridad. Llama la atención la fragilidad de las unidades en una zona conocida por su precaria ubicación ante huracanes.
Esta medida para encarcelar a los inmigrantes es una solución extendida, que el presidente Trump no había implementado en territorio nacional y había utilizado las cárceles de El Salvador para el envío de inmigrantes detenidos a la fecha.
Los periódicos internacionales han mostrado la cruda realidad que los migrantes viven bajo este gobierno: 4 mil personas deportadas desde EU se encuentran encarceladas en El Salvador e incluso, se ha grabado por agentes ICE la muerte de varios detenidos.
Las instalaciones recién inauguradas ya muestran signos de daños por las recientes lluvias ante la tormenta tropical 'Barry' que está afectando toda la zona noreste de México y el sur de Florida.
Este centro de detención se terminó en menos de 30 días y el gobierno invirtió casi 450 millones de dólares para su construcción; aún así, .esta inversión no parece verse reflejada en la nueva prisión.
"Podría ser tan bueno como lo fue Alcatraz", declaró el mandatario. ''Qué miedo, ¿no? Porque ese fue un sitio rudo".
Centro de detención en Florida es calificado de 'poco americano'
Organizaciones de Derechos Humanos y cientos de usuarios en las redes sociales han declarado su rechazo a esta nueva prisión; no solo por las condiciones infrahumanas en las que se pretende alojar a los detenidos, sino ante el posible riesgo de fallecimiento por el clima o posibles desastres naturales debido a la zona en la que están ubicados.
La fauna del lugar son los caimanes y, tanto el calor humano como el olor que se concentrará por la cantidad de detenidos, podría atraer a todo tipo de alimañas. Las enfermedades tropicales son una de las posibles consecuencias de encerrar a miles de personas en espacios confinados.
A pesar de las promesas de las autoridades responsables de este lugar, pues aseguran que los prisioneros estarán con los mínimos necesarios para su estancia; lo cierto es que los mismos ciudadanos lo dudan.
Mientras tanto, el resto del mundo solo puede seguir observando el escalamiento de un gobierno persecutorio, violento y desafiante a sus propias leyes constitucionales.