Evitar el microondas al descongelar carne no es solo una recomendación gourmet: también es una decisión clave para preservar la salud y la textura del alimento. A pesar de su popularidad por la rapidez, los riesgos asociados a este método pueden alterar más que solo el sabor de tus platillos.
Especialistas en ciencia alimentaria, advirtieron que el microondas, aunque conveniente, no proporciona un descongelado uniforme. Las zonas más delgadas de la carne comienzan a cocinarse mientras otras partes aún siguen congeladas, lo que crea el escenario perfecto para la proliferación de bacterias.
El mejor método para descongelar carne
Además del riesgo microbiológico, está la pérdida de jugos naturales. Las microondas generan calor de forma irregular, lo que extrae humedad de las fibras musculares.
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El resultado: una carne más reseca, con textura rugosa y menos sabor. Esto no solo afecta la experiencia gastronómica, sino que disminuye el valor nutricional del alimento, según los principios de calidad que rigen el control de alimentos.
En contraste, los especialistas sugieren descongelar la carne en la parte baja dentro del refrigerador, nunca fuera de él. Sin duda, un proceso más lento pero seguro.
A temperaturas constantes por debajo de los 4?°C, se evita la llamada “zona de peligro”, el rango entre 4 y 65?°C donde las bacterias se multiplican con mayor rapidez, permitiendo además que las fibras reabsorban parte del líquido perdido en el congelamiento.
Evita el micro
Aunque pueda parecer una opción práctica en un apuro, descongelar carne en el microondas es un atajo que puede salir caro. Por salud, sabor y seguridad, tomarse el tiempo para hacerlo correctamente sigue siendo la mejor receta. Y por eso, evitar el microondas para descongelar carne no es exageración: es prevención.