BANCARROTA

Prestigiosa marca de lujo y favorita de Angelina Jolie en bancarrota; no logra superar la pandemia

Pese a su prestigio y presencia en ciudades como Dubái, París y Nueva York, la marca no ha logrado superar el impacto de la pandemia

Escrito en GLOBAL el

La industria de la moda de lujo atraviesa uno de sus momentos más inciertos. Mientras grandes nombres luchan por mantenerse a flote, la casa británica Ralph & Russo, famosa por sus deslumbrantes diseños de alta costura, se encuentra nuevamente al borde de la quiebra.

Esta vez, se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, en busca de protección ante sus acreedores y de una oportunidad para reorganizar su debilitada estructura financiera.

Fundada en 2010, Ralph & Russo alcanzó notoriedad internacional no solo por sus piezas de diseño artesanal, sino por su estrecha relación con celebridades y figuras de la realeza.

Una de sus embajadoras más icónicas ha sido Angelina Jolie, quien ha lucido la firma en múltiples estrenos de Hollywood, alfombras rojas y sesiones fotográficas. Su elegancia natural y compromiso con la moda ética convirtieron a la actriz en una de las clientas más constantes de la marca.

Además de Jolie, otras celebridades como Beyoncé, Meghan Markle, Aishwarya Rai y Priyanka Chopra han elegido Ralph & Russo para momentos inolvidables, reforzando su estatus como símbolo de lujo moderno. Sin embargo, ni este desfile de nombres pudo evitar las turbulencias económicas que golpean al sector.

Las causas de esta crisis son múltiples, desde los efectos de la pandemia que redujo drásticamente la demanda de ropa formal y exclusiva, hasta la inflación, el alza en los costos laborales y una menor afluencia en las boutiques físicas.

Incluso con tiendas en destinos selectos como Dubái, Miami, Nueva York y París, Ralph & Russo no logró mantener el ritmo.

Esta no es la primera vez que la firma enfrenta problemas financieros. En 2021, fue vendida por 3.5 millones de libras tras otro proceso de reestructuración. Hoy, apenas tres años después, su supervivencia vuelve a estar en juego.

Lo que una vez fue sinónimo de exclusividad, belleza y sofisticación hoy representa el impacto real de un mercado cambiante, incluso para marcas que visten a las estrellas más grandes del planeta.