TRATADOS INTERNACIONALES

Guerra por el agua: EU busca que México se sienta presionado ante la amenaza de aranceles

La batalla por el agua entre ambos países no es nueva; expertos afirman que es necesario revisar la vigencia de un Tratado creado a mitad del siglo 20

Escrito en GLOBAL el

El gobierno de Estados Unidos ha decidido negar a México una solicitud fuera del Tratado Internacional de Aguas en 1944 para suministrar el preciado líquido en Tijuana, Baja California.

El Buró de Asuntos para el hemisferio occidental, una oficina de gobierno en el Departamento de Estado norteamericano declaró el pasado jueves que la producción del Valle de Río Grande está siendo afectada debido al retraso que presenta México en la entrega del volumen de agua definido en el último acuerdo actualizado.

Este Tratado compromete a las dos naciones a entregar a lo largo de cinco años, un determinado volumen de agua. Según el oficio firmado, ambos países deberán enviar cierta cantidad de agua en la zona de la cuenca del Río Bravo. Cuentan con cinco años para entregar el volumen completo designado señalado en tal documento. Además, México recibirá de Estados Unidos agua de los lagos Mead y Powell, ubicados en la zona de la cuenca del Río Colorado.

El balance de las cantidades

El Tratado indica que México habrá de enviar un total de 432 millones de metros cúbicos Mm3 a Estados Unidos, mientras que ellos entregarían a México un volumen de 1,890 Mm3 anuales. Sin embargo, el año pasado, en el marco del Plan Binacional de Contingencia ante la Escasez de Agua (PBCEA) y definido en los Lineamientos Internos de 2007 (LI), se hicieron algunos ajustes.

Fuente: Gobierno de México

La asignación que recibiría México sería reducida en 62 Mm3 y de nuestra parte, surtiríamos 37 Mm3 menos, lo que permitía un ahorro de agua recuperable. Sumado a esta reducción, se buscaría obtener al menos 247 Mm3 como resultado del programa de conservación de agua según lo pactado en el Acta 330. En total, para 2025, México tendría que haber recibido un volumen total de 1,504 Mm3.

Por tanto, es de lógica que Estados Unidos estaba al tanto de que la Cuenca Baja registraría una reducción total de hasta 1,275 Mm3. En su momento, la comisionada estadounidense asignada a las negociaciones, María Elena Giner, reconoció que ambos países sufren los efectos de la sequía en la cuenca y señaló que ambos gobiernos debieran mostrar la disponibilidad para explorar las opciones que permitieran administrar mejor el agua que compartían.

Fuente: Gobierno de México

¿Aún sigue vigente el Acta 325?

Un problema similar estuvo a punto de generarse durante el año 2000, cuando México sufrió también un retraso en su entrega por la sequía en la cuenca de Conchos. En la resolución de este caso, tanto México como Estados Unidos firmaron el Acta 325 en la cual Estados Unidos se comprometió a ayudar de forma humanitaria a México en caso de que no pudiera cumplir con la dotación de agua correspondiente en la cuenca baja del Bravo.

Expertos de la UNAM señalan que, a simple vista, pareciera que México recibe cuatro veces más agua en un año en comparación a lo que debe entregar a Estados Unidos; pero esta observación es limitada y no abarca el panorama completo, afirman que habrá de considerarse el total del acuerdo para no poner en tela de duda el espíritu de buena vecindad.

Panorama desértico

La zona fronteriza que une a ambos países es en su mayoría desértica, lo cual afecta directamente a los depósitos de agua, de los cuales se espera extraer agua para trasvasar. La disminución que han sufrido los lagos Mead y Powell y que abastecen al Río Bravo han decrementado el total de entregas de agua por parte de Estados Unidos si comparamos los números entre el 2023 y el 2024. A mediados de febrero del 2025, las dos presas llegaban tan solo al 35 por ciento de su total.

¿Acaso EU busca una ventaja en los aranceles?

Las recientes tensiones de los gobiernos por el anuncio de Trump en las nuevas políticas arancelarias están siendo aprovechadas por los líderes políticos en Texas. Figuras como Greg Abbott, gobernador de Texas o el senador republicano, Ted Cruz y otros legisladores de la misma zona, han solicitado al presidente que añada el reclamo de las aguas trasfronterizas dentro de las negociaciones de los aranceles.

Una congresista declaró a los noticieros internacionales que se calculan pérdidas para Texas en un número aproximado a los 1,000 millones de dólares causando “graves consecuencias económicas” y sugiere que los mexicanos están utilizando más agua de la permitida en el tratado para sus prácticas agrícolas.

Del lado mexicano, Tijuana resulta mucho más afectada que otras ciudades, puesto que sus ciudadanos dependen en su mayoría del suministro que proviene del río Colorado. Esta situación ha ido empeorando por la forma en que se manejan las aguas residuales y por las deficiencias en la infraestructura hídrica.

La negativa de agua fue develada a los dos días de las declaraciones hechas por Claudia Sheinbaum, presidenta de México, asegurando que si bien han actuado con prudencia, se defenderá la soberanía y los intereses de México ante la injusta imposición de aranceles al acero y aluminio mexicanos.

Por el momento, Sheinbaum anunció en la Mañanera del jueves esta semana, que el caso está siendo atendido por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos (CILA). Confirmó la importancia que tiene el problema, el cual existe porque hay menos agua.