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Jeffrey Dahmer: 10 detalles que no aparecen en la serie de Netflix

Pese a que está inspirada en hechos reales, ha detalles que se omitieron o bien, ocurrieron de manera distinta en la vida real. Aquí te contamos cómo sucedieron.

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A pocas semanas de lanzarse, la serie de Jeffrey Dahmer en Netflix se convirtió en todo un éxito, incluso superando en vistas a 'El Juego del Calamar'.

Pese a que se trata de una producción inspirada en un caso de la vida real, hay varios detalles que no aparecen ninguno de los 10 episodios que conforman la serie, o bien, fueron diferentes a como se retratan. Aquí te compartimos algunos.

No usaba sus anteojos durante el juicio

En la serie de Netflix podemos ver cómo el 'carnicero de Milwaukee' siempre usa sus característicos anteojos en la Corte, mientras escucha los testimonios de los familiares de sus víctimas, sin embargo, en la vida real, Dahmer se los quitaba.

Según palabras de su madrastra, esto lo hizo para no distinguir la cara de los testigos:

Él no usa anteojos para que así no pueda ver a la gente. Él entra en pánico.

Venden los lentes originales

Una tienda de artículos de colección puso a la venta las gafas que el caníbal utilizó durante su estancia en la cárcel, a 150 mil dólares. Un primer par fue vendido a un coleccionista privado, sin embargo, el monto de la venta no ha sido especificado.

El hermano de Jeffrey se cambió el nombre

En la serie producida por Ryan Murphy, David Dahmer, no tuvo mucha relevancia en la trama, sin embargo, en la vida real él sufrió los daños colaterales de los crímenes de su hermano, por lo cual se cambió el nombre legal para evitar que lo relacionaran con el asesino. Hasta la fecha se desconoce su nombre, sin embargo, se sabe que tiene 55 años, una esposa y dos hijos.

La última víctima terminó en la cárcel

Tracy Edwards fue el único sobreviviente de Dahmer, y su testimonio fue el más importante durante el juicio. Tiempo después de sobrevivir al asesino, Edwards terminó en la calle como indigente e incluso fue a dar a la cárcel, acusado de ser cómplice de un homicidio.

Le gustaba hacer bromas pesadas

En la vida real, al 'Monstruo de Milwaukee' le gustaba hacer bromas fuertes, como fingir que le daban convulsiones en medio del salón de clases o colarse en las fotos del anuario, como vimos en la serie. Sus bromas le ayudaron a ganar cierta popularidad con sus compañeros, quienes crearon un club de fans para celebrar sus bromas.

Rita Isbell

En uno de los capítulos vemos uno de los momentos más crudos de la historia, cuando la hermana de una de las víctimas pierde el control durante su testimonio en la Corte, al punto de querer golpear a Dahmer. Esta escena ocurrió en la vida real tal cual lo vemos en la serie de Netflix.

El libro sobre Jeffrey Dahmer

En la serie vemos cómo su papá escribe un libro para dar a conocer su versión de la historia y cómo los familiares de todas las víctimas lo demandan, sin embargo en la vida real solo dos familias lo demandaron por retratar sus vidas sin ningún permiso.

Tony Hughes

En la serie, vemos al joven sordomudo supuestamente mantener una relación con Jeffrey, sin embargo no se sabe a ciencia cierta si esto fue verdad, pues de acuerdo al testimonio del asesino, él conoció a su víctima la misma noche que lo mató, mientras que un amigo de Tony, declaró que ellos se conocieron dos años antes del asesinato y que fue a su casa al menos seis veces.

Christopher Scarver

Él fue quien terminó matando a Jeffrey Dahmer en la prisión. Un detalle que no se muestra en la serie, es que en la vida real, cuando Scarver fue cuestionado sobre por qué asesinó a Dahmer, dijo haber escuchado la voz de Dios, alentándolo a hacerlo. Actualmente sigue vivo, tiene 53 años y ha publicado tres libros de poesía desde prisión.

Su vida en el ejército

De acuerdo con compañeros de Jeffrey Dahmer que estuvieron con él en el ejército, él presumía de haber matado a un hombre, sin embargo, no le creyeron y pensaron que se trataba de una broma. Tras darse a conocer su caso, dos soldados declararon haber sido drogados y abusados por él.