Una de las preguntas más comunes entre quienes disfrutan de una noche de copas: ¿mezclar distintos tipos de alcohol intensifica la borrachera o la resaca del día siguiente? Muchos aseguran que sí, mientras otros afirman que es un mito.
Lo cierto es que esta creencia popular tiene matices interesantes, pero no se basa del todo en evidencia científica. Según la OMS, cualquier bebida alcohólica contiene etanol, una sustancia psicoactiva y tóxica cuya presencia determina esencialmente el efecto alcohol-relacionado, más que la variedad de la bebida.
Te podría interesar
La clave para entender lo que realmente ocurre está en saber cómo funciona la metabolización del alcohol en el cuerpo, qué papel juega el tipo de bebida y por qué a veces mezclar puede parecer que “te pega más”.
¿Mezclar bebidas alcohólicas te emborracha más?
Técnicamente, todas las bebidas alcohólicas contienen el mismo compuesto psicoactivo: etanol. Sin embargo, lo que cambia de una bebida a otra es la concentración de alcohol y los ingredientes adicionales que puedan interferir con la forma en que el cuerpo lo procesa. Por ejemplo: cerveza de 4-6 % de alcohol; vino de 11-14 %; tequila/ron/vodka de 35-40 %; licores dulces de 15-30 %. Esto significa que no es lo mismo beber 200 ml de vino que 200 ml de vodka. Aunque el volumen es el mismo, la cantidad de etanol que llega a tu sistema es muy diferente. Además, algunos estudios sugieren que las bebidas oscuras contienen más congéneres (subproductos del proceso de fermentación) que pueden agravar la resaca.
¿Entonces qué es lo que realmente emborracha cuando tomas?
Desde el punto de vista científico, lo que realmente te emborracha es la cantidad total de etanol consumido, no si ese alcohol proviene de distintas fuentes. Es decir: si tomas cinco copas de diferentes tipos de alcohol, te afectará lo mismo que si tomas cinco copas del mismo tipo, siempre que contengan la misma cantidad de etanol. Esta conclusión se apoya en análisis metabólicos y revisiones sobre consumo de distintas bebidas, esto de acuerdo al estudio "¿Riesgo 'alto'? Una revisión sistemática de las consecuencias agudas de mezclar alcohol con bebidas energéticas."
