El cuerpo de un hombre de aproximadamente 60 años, presuntamente en situación de calle, que falleció tras ser atropellado la noche del pasado 13 de septiembre en la autopista a Nuevo Laredo, a la altura del kilómetro 183, continúa sin ser identificado.
Ante la falta de reconocimiento, las autoridades ministeriales advierten que, de no ser reclamado, el cadáver podría ser enviado a la fosa común.
El trágico incidente fue reportado a la línea de emergencias 911, movilizando a Bomberos de Rescate y a la Policía Investigadora.
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Al llegar al lugar, los agentes encontraron el cuerpo del hombre sobre la carpeta asfáltica, en un tramo carretero rodeado de monte.
La víctima vestía pantalón y chamarra gris, tenis, y presentaba cabello cano, características que sugerían su condición de indigencia.
Paramédicos de Bomberos de Rescate confirmaron el deceso en el sitio.
Las lesiones visibles, que incluían una herida expuesta en la cara derecha y una fractura en la mano derecha, eran compatibles con un atropellamiento.
Sin embargo, al momento del hallazgo, el hombre no portaba identificación alguna, lo que complicó su reconocimiento.
Tras las actuaciones correspondientes, elementos de investigación y personal de Servicios Periciales ordenaron el traslado del cuerpo a la funeraria para la práctica de la autopsia de ley, donde ha permanecido desde entonces.
Las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía para que, si alguien reconoce la descripción o tiene información sobre el paradero de una persona con estas características, se acerque a las instancias pertinentes para ayudar a identificar al fallecido y evitar que su cuerpo sea inhumado en la fosa común.