GOURMET DE LA FRONTERA

Tacos de papa de Nuevo Laredo: ¿cuáles son los mejores?, según los fronterizos

Los establecimientos tradicionales de la ciudad mantienen vivo un sabroso antojo local cuyo sabor y precio accesible atraen a los habitantes y visitantes que buscan experiencias auténticas en la gastronomía fronteriza

Los tradicionales tacos de papa de la frontera.
Los tradicionales tacos de papa de la frontera.Créditos: Google Maps
Escrito en NUEVO LAREDO el

Los tacos de papa de Nuevo Laredo se han convertido en un símbolo culinario que sintetiza la cultura alimentaria de la frontera.

Aunque parten de una receta sencilla, su permanencia en el gusto popular demuestra cómo un platillo humilde puede adquirir un gran valor que se pone a la par de recetas de platillos más elaborados.

Los tacos de papa de Nuevo Laredo

Su atractivo radica en la combinación de economía y sabor que ha atendido los paladares de generaciones de comensales a la orilla del Río Bravo.

A lo largo de la ciudad pueden encontrarse varios puestos y expendios que han dado nuevas formas a esta preparación tradicional.

Algunos optan por las versiones crujientes, otros por presentaciones al vapor o estilos más variados. Esta diversidad ha permitido que la receta se mantenga vigente y evolucione sin perder su esencia.

Tacos La Obregón

Entre todos ellos destacan dos establecimientos cuya trayectoria se ha consolidado con el paso del tiempo. El primero, los Tacos de papa La Obregón, se sitúa sobre la calle del mismo nombre, entre Lincoln y Zaragoza, punto al que acuden los clientes atraídos por un precio que se mantiene competitivo.

Allí se elaboran tacos elaborados con tortilla roja, enrollados y dorados hasta obtener una textura firme, acompañados de col y una salsa verde tradicional.

Muchos clientes añaden crema para acentuar el contraste entre lo crujiente y lo suave. Este local ha sido reconocido en antiguas ferias culinarias de la ciudad, ganando varias veces el primer lugar.

Tacos del Santo Niño

El segundo referente es el histórico puesto del Santo Niño, ubicado detrás del templo homónimo, en pleno centro de la ciudad.

Sus tacos, pequeños y doblados, destacan por un toque particular logrado con repollo, jitomate y picante. Su tamaño facilita que se consuman en uno o dos bocados, lo que ha generado la costumbre de pedirlos por docenas.

Las preferencias suelen dividir al público, pero la mayoría coincide en que ambas propuestas resguardan el auténtico sabor de los tacos de papa de Nuevo Laredo, el sabor de la frontera.