Una de las mayores inversiones de una familia es la adquisición de un automóvil y por eso cuando se descompone se mueven los tiempos y los esfuerzos de todos los miembros de esa familia.
Aunado al alto costo de tener en buenas condiciones el vehículo con los mantenimientos adecuados como cambios de líquidos, revisión general mecánica y atención a los detalles también se debe considerar las descomposturas que pueda presentar el auto.
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Una de las descomposturas más comunes de los autos se trata sobre las refacciones menores; por ejemplo, alguna pieza como bujías, alternador, radiador, alguna llanta, un rin; etcétera.
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Que si bien no son piezas tan caras, en ocasiones, las familias no pueden subsanar el costo de una pieza original, así que las opciones de buscar las piezas de refacción en un yonke se vuelven más que asequibles.
Sin embargo otro problema aquí es que tal vez el auto para el que estamos buscando piezas no lo encontremos con facilidad en los yonkes, impidiendo que logremos obtener la pieza que nos falta a un menor costo.
Pero veamos, ¿qué es un yonke?
Para los que no están muy familiarizados con este término, son lugares o negocios establecidos en los que se compran automóviles a bajo costo para obtener ganancias vendiéndolos por partes o refacciones.
Otro nombre que se le ha dado a los yonkes es el de "deshuesadero" por su comparación con que se venden las partes del auto; es decir, los "huesos" del automóvil.
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Si estás pensando en comprar un vehículo de segunda mano, considera que estos vehículos son de los que más encontrarías refacciones en los clásicos yonkes de Nuevo Laredo:
- Jeep Liberty
- Jeep Grand Cherokee y sus variantes
- Explorer Ford, desde hace años de estos modelos nunca faltan refacciones
- Avenger Dodge
- Rogue Nissan
- Platina Nissan
- Fussion Ford
- Malibú Chevrolet
- Cobalt Chevrolet
- Cruze Ford
Ahora ya lo sabes, si estás pensando adquirir alguno de estos vehículos no te preocupes, encontrarás muchas refacciones en caso de descompostura; pero, ojalá esto nunca te suceda.