La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) anunció la captura de Reyna "N", una mujer acusada del homicidio de su padre, cuyos restos fueron encontrados enterrados en el patio de su vivienda en la alcaldía Iztacalco. La detención tardó 21 años, tiempo en el que estuvo prófuga de la justicia.
La investigación
El caso se remonta al 2004, cuando la mujer sostuvo una discusión con su padre, durante la cual presuntamente lo golpeó en repetidas ocasiones con un objeto contundente, causando su fallecimiento.
Posteriormente, Reyna colocó el cuerpo en una bolsa de plástico, lo enterró en el patio de su domicilio y se comunicó telefónicamente con sus hermanos para confesarles lo ocurrido, además de solicitarles que no la buscaran. La nota que dejó junto a las restos también contenía una disculpa y una petición de silencio.
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La mujer permaneció en varios estados del país durante más de dos décadas, hasta que agentes de la Policía de Investigación lograron localizarla y arrestarla en 2025. Tras su aprehensión, fue trasladada al penal de Santa Martha Acatitla, donde fue puesta a disposición de la autoridad judicial. Será esta instancia quien defina su situación jurídica.
¿Qué dijeron las autoridades?
Mediante un comunicado, la Fiscalía capitalina indicó que los hechos delictivos serán investigados con rigor, imparcialidad y en apego a la ley. Además, recordó que, conforme al Código Nacional de Procedimientos Penales, Reyna "N" goza del principio de presunción de inocencia en todas las etapas del proceso, condición que se mantiene hasta que exista una sentencia condenatoria.
De acuerdo al Código Penal Federal, el delito de homicidio es cometido por quien priva de la vida a otra persona, y la sanción puede variar según las circunstancias, pero en homicidio simple intencional, la pena oscila entre doce y veinticuatro años de prisión.