El cirujano implicado en la muerte de Paloma Nicole Arellano, la adolescente de 14 años, ha sido suspendido, según informó la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (AMCPER). El caso sucedió en el estado de Durango y se sabe que el fallecimiento de la menor fue después de ser intervenida por una cirugía estética.
El aviso de la asociación fue emitido el martes 23 de septiembre y está respaldado por el Consejo Directivo de la AMCPER. El organismo mencionado agrupa a los cirujanos plásticos certificados en México. Tras darse a conocer el caso, se han remitido los hechos al Comité de Ética de AMCPER.
“Se ha solicitado la suspensión provisional estatutaria del médico denunciado, a fin de no entorpecer las averiguaciones necesarias, y sin perjuicio de que el proceso de investigación se realizará en los términos previstos en el Orden Jurídico Nacional”, indica el comunicado.
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La suspensión del médico solo se aplica dentro del ámbito de la asociación, por lo que solo podría tener sanciones internas según los estatutos de AMCPER por lo que el cirujano investigado podría seguir ejerciendo siempre y cuando su cédula profesional esté vigente.
¿Cómo murió la jovencita?
Paloma Nicole murió el 20 de septiembre y según la investigación, su fallecimiento está asociado a complicaciones de salud tras someterse a intervenciones estéticas, las cuales fueron autorizadas por la madre de la joven y el cirujano que la intervino es Víctor “N”, padrastro de la menor.
Carlos Said Arellano es el padre de la menor y ha sido quien ha denunciado públicamente a su exesposa y al cirujano, pareja de la mujer, por no haber solicitado el consentimiento para llevar a cabo la cirugía. El padre de Paloma Nicole dijo que fue engañado cuando se la llevaron a la clínica.
Según el padre, la mamá le avisó que llevaría a Paloma a la sierra de Durango porque la joven estaba pasando por un contagio de COVID-19, por lo que estaría sin comunicación sin saber que en realidad iba a ser intervenida en una clínica de cirugía estética.
Posteriormente, el padre de la menor recibió un mensaje de que su hija había sido hospitalizada. Al llegar, la encontró intubada y con diagnóstico de paro respiratorio y, con el paso de los días, la jovencita sufrió muerte cerebral. En el funeral de la joven, el padre notó ropa quirúrgica y decidió investigar. Con ayuda de familiares, se dio cuenta de que la jovencita tenía implantes, por lo que denunció ante la Fiscalía General del Estado de Durango.
AMCPER se ha puesto a disposición de las autoridades en caso de que se necesiten estudios periciales colegiados para la investigación. El certificado de defunción emitido por la clínica estableció causa de muerte como edema cerebral, encefalopatía hipóxica y bradicardia.