Un niño de apenas 2 años de edad murió tras beber ácido para limpiar aires acondicionados. A pesar de los esfuerzos de los médicos por salvarle la vida, su pequeño cuerpo no soportó la reacción del ácido. Lo anterior sucedió el miércoles 2 de julio por la noche.
En Piedras Negras, Coahuila, fue donde sucedió la tragedia, la cual conmocionó a la comunidad. Fue en la colonia Ramón Bravo, al norte de la ciudad fronteriza, donde sucedió la tragedia. Autoridades alertan a la población sobre el uso que se le da a los diferentes químicos para realizar trabajos, tal es el caso del ácido fosfórico y otros compuestos corrosivos.
¿Cómo fue que el niño se tomó el ácido?
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Según las autoridades de Piedras Negras, indicaron que el niño de nombre José Luis fue llevado por su padre a emergencias del Hospital General de Zona número 11 del IMSS, aproximadamente a las 11:30 de la noche. El padre se llama Edgar y tiene 21 años. Él le dijo a los médicos que el niño había bebido ácido porque él trabaja limpiando aires acondicionados.
El menor de edad bebió el químico que estaba a su alcance en su casa. Según el padre, José Luis bebió el ácido accidentalmente, por lo que fue llevado rápidamente al hospital. Los médicos revisaron al menor y comenzaron a aplicarle curaciones, pero luego de horas de esfuerzo, el niño falleció.
El niño murió por las severas lesiones internas causadas por el ácido altamente corrosivo. Tras la muerte del menor, llegó al hospital personal de la Agencia de Investigación Criminal y de la Policía Civil Coahuila, para realizar las investigaciones, mientras que el cuerpo del menor fue llevado al Servicio Médico Forense para realizarle la necropsia de ley y de esta manera oficializar la causa de la muerte de José Luis.
La Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia (PRONNIF) comenzó una investigación para conocer el entorno familiar del niño que murió por tomar ácido. El líquido que ingirió el menor, era utilizado por el padre para limpiar aires acondicionados. El líquido es tan peligroso que causa quemaduras químicas internas y externas, daño en órganos vitales y, como en este caso, la muerte.