Un nuevo caso de violencia en carretera ha generado alarma entre transportistas y automovilistas: un asalto a una unidad de carga fue captado por una cámara de seguridad en la autopista México–Querétaro, a la altura del municipio de Jilotepec, Estado de México, durante las primeras horas del martes 2 de julio de 2025.
El video, difundido en redes sociales, revela el modus operandi empleado por los delincuentes: una camioneta de carga reduce la velocidad frente al tráiler, obligándolo a detenerse. Segundos después, un camión tipo caja se cruza bruscamente para cerrarle por completo el paso, acorralando al conductor sin posibilidad de escape. En ese momento, dos sujetos armados bajan del vehículo, abren la puerta de la cabina, golpean al operador y lo sacan por la fuerza.
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Según el reporte preliminar, el conductor fue privado de la libertad y obligado a subir a la parte trasera del tráiler, del cual hasta el momento se desconoce su paradero, al igual que el de la unidad robada.
Este asalto ha desatado una nueva ola de preocupación en el sector del transporte de carga, ya que los tramos carreteros del Estado de México, particularmente en la autopista México–Querétaro, son considerados de los más peligrosos del país. Transportistas han denunciado que los robos ocurren con mayor frecuencia y con niveles de violencia cada vez más altos.
El hecho ya es investigado por la Guardia Nacional, División Carreteras, en conjunto con la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, quienes ya analizan las grabaciones del C5. Sin embargo, líderes transportistas expresaron su frustración, afirmando que las cámaras solo sirven para documentar el delito, pero no para evitarlo ni castigar a los responsables.
Además del robo de mercancía, este nuevo ataque resalta la vulnerabilidad de los operadores y la falta de medidas preventivas efectivas. Muchos de ellos han exigido más patrullajes, retenes de revisión y estrategias de inteligencia para frenar esta ola delictiva que amenaza a uno de los sectores clave de la economía nacional.
La facilidad con la que fue ejecutado el robo en pleno corredor industrial ha encendido nuevamente las alarmas en torno a la seguridad vial. Mientras tanto, familiares del conductor desaparecido continúan esperando noticias.