Lo que parecía una noche común en la colonia Infonavit Iztacalco, Ciudad de México, terminó en tragedia. Eliut, un hombre de 49 años caminaba junto a su hija por la avenida Girasol y Peñón cuando una motocicleta se les acercó sigilosamente. De pronto, sin previo aviso, la mujer que viajaba como copiloto sacó un arma y le disparó a quemarropa.
El tiro lo recibió en el pecho. Eliut apenas logró mantenerse de pie antes de desplomarse frente a su hija, quien intentó desesperadamente sostenerlo y pedir ayuda.
Todo quedó registrado por una cámara de videovigilancia. La hija hizo señas a una motocicleta que pasaba cerca, pero no recibió apoyo. El agresor y su cómplice huyeron sin mirar atrás.
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Menos de tres minutos después, la atacante identificada como Gabriela “N” y su acompañante llegaron a una vivienda cercana. Ahí, en casa de la suegra de Gabriela, se cambiaron de ropa para despistar a las autoridades. El video muestra claramente cómo ambos ingresan con una apariencia y salen poco después vestidos de forma distinta, subiendo a un automóvil para escapar.
La sorpresa vino días después, cuando fueron arrestados por otro delito. Gabriela y Alexis “N” fueron detenidos tras robarle a una mujer en la misma alcaldía. Al ser interrogados, las piezas comenzaron a encajar. Ella confesó: el asesinato de Eliut fue ordenado por Daniel, un hombre con el que mantenía contacto desde hacía seis meses y que, según declaró, era el exnovio de la hija de la víctima.
Daniel le habría pagado 125 mil pesos para “darle un susto” al papá de su ex. Pero el “susto” se convirtió en una ejecución. Alexis, por su parte, dijo que fue forzado a conducir la moto bajo amenazas y que ni siquiera fue pagado.
Ambos enfrentan ahora cargos por homicidio doloso con arma de fuego. Las autoridades ya abrieron una carpeta de investigación. Mientras tanto, el caso ha desatado indignación: un conflicto personal terminó segando una vida, dejando a una hija marcada por el horror de ver morir a su padre frente a sus ojos.