PALETERÍA ARTESANAL

Esta es la única paletería mexicana que le hace frente a helados Holanda, ¿quién es el dueño?

A pesar de disputas legales por la marca, la paletería sigue siendo un símbolo de orgullo nacional que trasciende fronteras y generaciones

Escrito en NACIONAL el

Cuando hablamos de helados en México, muchos piensan automáticamente en sabores tradicionales como chocolate, vainilla, fresa o limón. Sin embargo, hay una paletería que ha logrado trascender generaciones y competir directamente con gigantes internacionales como Helados Holanda.

Estamos hablando de La Michoacana, un ícono mexicano que no solo destaca por su sabor y variedad, sino también por su historia de emprendimiento y familia.

La Michoacana no es una sola empresa ni una franquicia convencional. Su origen se remonta a la década de 1930 en el pequeño pueblo de Tocumbo, Michoacán, donde Rafael Malfavón comenzó a elaborar paletas artesanales utilizando principalmente frutas de estación, logrando que más del 78% de cada paleta fuera fruta pura. Esta receta artesanal fue la clave para su éxito y aceptación en mercados locales y, posteriormente, en todo el país.

Lo curioso es que La Michoacana funciona como una gran red informal de paleterías familiares que comparten recetas, proveedores y logotipos, pero no existe un dueño único ni una empresa matriz que centralice la marca.

Esta característica ha permitido su expansión, tanto dentro de México como en Estados Unidos y Centroamérica, manteniendo el sabor casero y la calidad artesanal que la distinguen.

Sin embargo, esta estructura también ha generado desafíos legales, pues varias personas y grupos han intentado registrar variantes del nombre y la marca, dando lugar a distintas versiones como “La Michoacana Real” o “La Flor de Michoacán”. A pesar de ello, la marca sigue siendo sinónimo de tradición y autenticidad en el mundo de los postres helados mexicanos.

Así, mientras Helados Holanda domina con su presencia y variedad en el mercado, La Michoacana continúa siendo la única paletería mexicana que realmente le hace frente, defendiendo un legado de trabajo familiar, sabor artesanal y orgullo nacional que ningún gigante extranjero ha logrado igualar.

Hoy, con más de 15 mil paleterías distribuidas en México, Estados Unidos y países centroamericanos, La Michoacana no solo es un negocio, sino un símbolo cultural que representa el trabajo familiar, la migración y el orgullo mexicano.

Cada paleta que se disfruta es un pedazo de historia, sabor y tradición que continúa refrescando generaciones.