Hoy se cumplen 15 días de la tragedia en Santiago, Nuevo León, aquella en la que murió toda una familia que regresaba a Nuevo Laredo, Tamaulipas; la camioneta cayó más de 100 metros a un barranco, se incendió y murieron 12 de 16 de sus integrantes. A dos semanas del terrible accidente, las autoridades no han puesta atención en ese tramo.
Fue en la curva de la Carretera de Cola de Caballo-Laguna de Sánchez, en el kilómetro 15, en donde el domingo 23 de marzo de 2025 la camioneta Nissan Urvan modelo 2024 presentó una falla en los frenos y cayó.
En el lugar, de acuerdo a una visita que hizo el periódico El Norte, el área en el que la camioneta se desbarrancó sigue sin barrera de contención, lo cual es un peligro latente para todos los conductores que transitan por ahí y deben bajar por esa pendiente.
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Colocan ofrendas dedicadas a las 12 víctimas
Desde hace varios días fueron colocadas algunas ofrendas dedicadas a las 12 personas que murieron en el accidente hace dos semanas. Según testimonios, habrían sido personas que viven cerca.
Globos, flores y algunos peluches fueron colocados a la orilla de la carretera, a metros de una pequeña capilla que tiene algunas décadas.
El 23 de marzo de 2025 murieron 12 personas, entre ellas dos niños que vivían y estudiaban en Laredo, Texas, quienes habían pasado el fin de semana en una de las cabañas cercanas al lugar. La mayoría vivía en Nuevo Laredo, aunque eran de Dr. Arroyo, Nuevo León.
Los restos de los fallecidos fueron despedidos en esta ciudad fronteriza, los últimos fueron los menores en Laredo, Texas. La madre de los niños, Erika Camacho, fue trasladada a un hospital en San Antonio, Texas, en donde le informaron de la muerte de sus hijos y su esposo.
La Carretera a Cola de Caballo ha sido testigo de múltiples y muy lamentables accidentes en los que muchas personas han perdido la vida, por lo que se espera que las autoridades contribuyan con señalamientos y las barreras de contención en lugares claves para evitar que la lista siga creciendo.