Cuando uno se da de alta en el Servicio de Administración Tributaria (SAT), se tiene que definir algunos aspectos y, por lo tanto, conocerlos previamente. Por esta razón te daremos a conocer todo lo que debes conocer sobre los dos regímenes fiscales que el SAT contempla: persona física y moral
¿Qué es una persona física?
Según el SAT, una persona física es cualquier individuo que lleva a cabo una actividad económica, este puede ser empleado, profesionista que presta sus servicios, comerciante o vendedor.
- Algunos de los regímenes a los que puede pertenecer una persona física son, entre otras:
- Sueldos y salarios: remuneración que recibe por parte de un empleador.
- Ingresos asimilados a salarios: de trabajadores independientes.
- Actividades empresariales por medio de plataformas tecnológicas: como prestadores de servicios, arrendamiento y demás.
- Dividendos: al recibir una parte proporcional de las ganancias de una empresa.
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¿Qué es una persona moral?
De acuerdo a la dependencia federal, una persona moral es la suma de las personas físicas que se unen con un fin comercial o no lucrativo. A pesar de que son intangibles, tienen un marco legal de derechos y obligaciones; en este caso, fiscales.
Los regímenes a los que pueden pertenecer son, entre otros:
- Régimen general: son las sociedades lucrativas, organismos descentralizados que venden bienes o servicios, bancos y casas de bolsa.
- Régimen opcional de grupos de sociedades: con sociedad integradora y sociedades integradas.
- Régimen de personas morales con fines no lucrativos: colegios de profesionales, cooperativas, sindicatos, sociedades civiles y demás.
¿Qué diferencias existen entre Persona Física y Persona Moral?
La primera diferencia que existe entre persona física y moral es que una persona física es un individuo y la persona moral es un grupo de individuos con un fin común, comercial o no lucrativo. Esto quiere decir, que una empresaria o empresario es persona física, y la compañía que funda es la persona moral.
Como persona física actúas por cuenta propia y te representas de forma autónoma (salvo en casos donde exista una incapacidad legal). Por otro lado, una persona moral es intangible, no se puede representar a sí misma, sino que será responsabilidad de las personas físicas que la integran legalmente.
Algo que debe saber es que siempre estarás considerado como una persona física ante el SAT: incluso si formas una persona moral con otros individuos, no renunciarás a tu condición de persona física.
Si hablamos de cómo te conviene registrarte ante el SAT, deberás tener presente que si tienes un negocio unipersonal, puedes registrarte como persona física con actividades empresariales, donde ofreces tus productos o servicios de forma independiente.
Además, existe la posibilidad de registrar una persona moral unipersonal por medio de las Sociedades por Acciones Simplificadas o SAS, si tienes ingresos menores a 5 millones de pesos, donde serías considerado como accionista único.
En cambio, si eres empleado, la opción es que estés dado de alta como persona física.
Algunos ejemplos de personas físicas son:
- Empleados de pymes o grandes empresas constituidas
- Profesionistas que ofrecen sus servicios de manera independiente, como consultores, asesores externos o prestadores por encargo (por ejemplo, un diseñador, arquitecto, etc.)
- Comerciantes de pequeños negocios, que regularizan sus actividades (como en ventas en línea, locales y mercados ambulantes)
- Trabajadores independientes donde quien los contrata realiza la retención de impuestos (que es el régimen de sueldos asimilados a salarios).
Ejemplos de Personas Morales
Por otra parte, los ejemplos de personas morales más comunes son:
- Microempresas: salones de belleza, tiendas de abarrotes, cafeterías y en general los negocios con menos de diez empleados.
- Pequeñas y medianas empresas: como talleres de costura, centros de formación, autolavados, arrendadoras de autos, arrendadoras locales de bienes raíces y todo tipo de empresas que tengan entre 11 y 30 empleados, en el caso de las pequeñas, y menos de 100 cuando son medianas.
- Grandes empresas: cadenas de restaurantes, redes de gasolinerías, empresas de software, empresas transportistas y toda compañía que tenga más de 101 trabajadores.