Una tragedia ha dado la vuelta al mundo, esto después de darse a conocer que once personas fueron arrestadas por la muerte de una familia de cuatro integrantes por presunto envenenamiento.
Según información de ABC Internacional, una familia integrada por una mujer turco-alemana, su esposo y sus dos hijos pequeños, vacacionaba desde Alemania en Estambul, la ciudad más grande de Turquía cuando empezaron a sentirse mal después de consumir varios platos típicos de comida callejera en el popular barrio ribereño de Ortakoy el pasado 12 de noviembre.
Los pequeños fueron los primeros en perder la vida, posteriormente la madre murió el viernes pasado, en tanto el padre Servet Bocek, murió el lunes después de pasar varios días en terapia intensiva. Las víctimas mortales fueron identificadas como Cigdem Bocek y sus hijos Kadir, de seis años, y Masal, de tres.
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En un principio, la fiscalía de Estambul abrió una carpeta centrada en una posible intoxicación alimentaria. No obstante, medios turcos reportaron que surgieron nuevas evidencias que cambiarían el rumbo del caso.
Según el diario Hurriyet, una sustancia química utilizada para combatir una plaga de chinches habría sido rociada en una habitación de la planta baja del hotel en donde la familia se hospedaba.
Esa sustancia podría haber llegado a la habitación de la familia, localizada en el primer piso, a través de un ducto de ventilación en el baño.
El hotel, cuyo nombre no ha sido revelado, se encuentra en el distrito de Fatih, cerca de la histórica península de Estambul. Fue evacuado el sábado luego de que otros dos huéspedes presentaran síntomas similares, y el domingo quedó oficialmente cerrado por autoridades municipales.
Cabe hacer mención que entre las once personas detenidas hay cinco vendedores de comida callejera, el dueño del hotel, dos empleados y tres trabajadores de la empresa de control de plagas.