Al norte del área metropolitana de Monterrey, en el municipio de Mina, se encuentra un lugar que conjuga épocas pasadas y leyendas escalofriantes: la Hacienda del Muerto. También conocida como Hacienda de San Antonio de las Salinas o Hacienda de San Antonio del Muerto, esta construcción del siglo XIX ha resistido el paso del tiempo entre ruinas, relatos sobrenaturales y valor patrimonial.
La hacienda fue edificada hacia 1851 por Antonio de la Garza Elizondo, descendiente de Bernabé de las Casas, uno de los fundadores de la región.Originalmente se llamó Hacienda San Antonio de las Salinas en honor a San Antonio de Padua, antes de que el nombre “del Muerto” se adoptara, posiblemente por el cercano arroyo del Muerto o por su cercanía a la Sierra del Muerto, cuya forma recuerda la silueta de una persona tendida.
Durante su apogeo, la hacienda contaba con galeras, acueductos, capilla y extensiones agrícolas. Fue escenario de conflictos durante el siglo XIX: entre liberales y conservadores, y también se utilizaron sus instalaciones como cuartel militar en épocas convulsas.
Te podría interesar
Con el tiempo cayó en abandono, especialmente tras la Revolución Mexicana, y en 1997 pasó a ser propiedad del municipio de Mina. En 2004 comenzaron esfuerzos por su restauración, aunque muchas partes permanecen deterioradas.
Leyendas, mitos y sucesos paranormales
La fama de “embrujada” ha sido alimentada durante décadas por historias locales. Algunos relatos evocan la presencia de una mujer vestida de blanco que espera en la capilla por un esposo fallecido, o reuniones de brujas en la cúpula durante la noche.
Incluso investigadores paranormales han documentado fenómenos como apariciones, luces inexplicables y sonidos extraños en sus ruinas, pues dicen que durante algunas noches se han detectado figuras en los ventanales, susurros o incluso sombras que se mueven entre los muros.
La ex hacienda no atrae solo por su aura sobrenatural, sino también por su estética rústica y melancólica. Sus muros de adobe, columnas en ruinas y entorno desértico la hacen un escenario fascinante para fotógrafos, exploradores y cineastas.
Uno de los momentos más notables fue cuando el dueto australiano Empire of the Sun filmó parte del videoclip de “We Are the People” en locaciones de Nuevo León, incluyendo escenas en Mina y sus escenarios desérticos.
En la serie mexicana La Piloto 2, también se utilizó la hacienda como set para el episodio final, reforzando su atractivo como locación dramática. En un dato curioso, en el municipio de Mina se han encontrado restos de un mamut, que hoy se exhiben en el Museo Bernabé de las Casas.