En México, un país rico en paisajes impresionantes y carreteras serpenteantes, los traileros destacan una ruta que combina la belleza escénica con la peligrosidad extrema.
Situada en el estado de Veracruz, esta carretera se ha ganado la reputación de ser tanto la más hermosa como la más peligrosa del país, según la perspectiva de aquellos que la recorren a diario.
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Las Cumbres de Maltrata
Con 40 kilómetros de ingeniería impresionante, la carretera 150-D, también conocida como Cumbres de Maltrata, se eleva a una altura de mil 178 metros, explorando un valle entre los cerros al oeste de Ciudad Mendoza.
Esta obra maestra vial, construida por los hermanos Escandón, conecta los estados de Veracruz y Puebla, ofreciendo vistas panorámicas de verdes cerros y una gran variedad de árboles.
A pesar de su belleza natural, esta carretera es conocida por sus peligrosas curvas y pendientes inclinadas, desafiando a conductores experimentados.
La densa niebla que a menudo cubre la carretera, combinada con las curvas cerradas, crea un ambiente húmedo que dificulta la visibilidad y aumenta los riesgos para los viajeros.
Hermosa y peligrosa
Esta ruta vital, que conecta la autopista Puebla-México y permite el tránsito diario de miles de vehículos, desde particulares hasta tráileres de carga y autobuses de pasajeros, es también escenario de numerosos incidentes.
Volcaduras, rapiñas, robos y, lamentablemente, incluso muertes, son parte de la trágica realidad que enfrentan aquellos que se aventuran por la "carretera maldita".
La Cumbres de Maltrata, clasificada como una carretera Tipo B con cuatro vías, presenta desafíos adicionales. Sin experiencia, los vehículos, especialmente los tráileres, podrían derrapar y volcarse en sus curvas pronunciadas.
Esta combinación de factores la coloca entre las carreteras más peligrosas de México, junto con La Rumorosa en Baja California, la autopista México-Puebla y la carretera federal Toluca-México.
Visiones imponentes
A pesar de los riesgos, los amantes de la naturaleza y los viajeros intrépidos consideran que el recorrido por las Cumbres de Maltrata vale la pena.
Las vistas panorámicas y la visión del imponente Pico de Orizaba son una recompensa para aquellos dispuestos a enfrentar el desafío.
Sin embargo, al embarcarse en este viaje, es crucial tener en cuenta los consejos de seguridad al viajar por carretera federal.
La belleza de la Cumbres de Maltrata se encuentra entre la dualidad de la admiración por la naturaleza y la conciencia constante de los peligros que acechan en cada curva.