Esta vez no fue una falla mecánica, sino un apagón de luz el que provocó el pánico a quienes utilizaban un elevador en el Hospital de Zona No. 21 del IMSS, en Monterrey.
El apagón ocasionó que el elevador, lleno de personas, se quedara atorado.
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Elementos de protección Civil llegaron para apoyar a los afectados, poco después de las 12:30 horas cuando se reportó la falla en el suministro eléctrico.
Por fortuna se restableció al poco tiempo y comenzó a funcionar normalmente.
Ya estando ahí, los elementos de PC hicieron un recorrido por los demás elevadores del Hospital y encontraron que uno se encuentra fuera de servicio por mantenimiento.
Ya anteriormente se han detectado fallas en los elevadores de las Clínicas 2, 21, 25, 32 y 67.
En todas ellas, el servicio de mantenimiento que se les da, es muy poco.
Las fallas que presentaron algunos de estos son que se quedaban atorados, no cerraban las puertas a la mitad o no respondían a las indicaciones. Otros más definitivamente están clausurados.
Toda esta situación en los elevadores de los Hospitales del IMSS se da después de que en Michoacán, un elevador mató a una niña que era transportada en una camilla hacia otro piso.
Y después se han estado reportando fallas en otras clínicas del IMS en otros estados.