¿Dinosaurios que hablaban? ¡Eso solo en México! Aunque parezca una broma, es un hecho muy real. El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) anunció que sus arqueólogos descubrieron una nueva especie de saurio que vivió en el norte de México en la región de Coahuila hace 73 millones de años.
Según el comunicado oficial, un ejemplar de dinosaurio herbívoro, bautizado como Tlatolophus galorum, murió “en lo que debió ser un cuerpo de agua abundante en sedimentos, por lo que su cuerpo fue rápidamente cubierto por la tierra y pudo ser preservado en el camino. a través de los años ".
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Dinosaurios que hablaban
La cola de este dinosaurio fue encontrada en General Cepeda, Coahuila en 2013, pero a medida que avanzan las excavaciones se ha descubierto la cresta del animal de 1.32 metros de largo, así como otros 34 fragmentos óseos del cráneo.
Aunque este descubrimiento ya es maravilloso por derecho propio, lo que lo hace excepcional es la morfología del cráneo del animal. Este tipo de dinosaurio es parte de la familia de los hadrosaurios y la cresta les permitía "hablar" entre ellos.
El nombre Tlatolophus galorum significa "cresta de la palabra". El género " Tlatolophus " proviene del náhuatl " tlahtolli " ("palabra), mientras que" lophus " se refiere a la palabra griega para "cresta".
“El examen mostró que la cresta y el morro eran diferentes a los ejemplares de Velafrons y más parecidos a lo que se observa en otra tribu de hadrosaurios: los parasaurolophins; Las diferencias no acababan ahí: la cresta del ejemplar de la poblacieon de General Cepeda, con forma de gota, se oponía incluso a la cresta tubular de Parasaurolophus, la especie más conocida de los Parasaurolophins, que habitaba los actuales territorios de Nuevo México y Utah. , Estados Unidos, así como Alberta, Canadá, y que ha sido retratado en películas como Jurassic Park”, dice el INAH en un comunicado.
Los investigadores del INAH compararon este espécimen con otros dinosaurios encontrados en la región de la familia de los lambeosaurus, pero descubrieron que se trataba de una nueva especie que podía comunicarse a través de ciertos sonidos.
Sabemos que tenían oídos con la capacidad de recibir sonidos de baja frecuencia, por lo que debieron ser dinosaurios pacíficos pero parlanchines.
"Algunos paleontólogos teorizan que emitían sonidos fuertes para ahuyentar a los carnívoros o con fines de reproducción, lo que sugiere que las crestas tenían colores llamativos”, explica Ángel Alejandro Ramírez Velasco, estudiante de doctorado en el Instituto de Geología de la UNAM, en el comunicado oficial.