El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó un decreto que otorga estímulos fiscales a sectores clave de la industria exportadora, con el propósito de impulsar la inversión y la relocalización de empresas hacia el país bajo la estrategia de “nearshoring”.
Este nuevo decreto, publicado en el Diario Oficial de la Federación, permite la deducción inmediata de la inversión en bienes nuevos de activo fijo y una deducción adicional de gastos de capacitación.
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“Que el surgimiento y desarrollo paralelo de eventos con alcance global como la pandemia de covid-19 y los conflictos geopolíticos generaron condiciones adversas, que obligaron a las empresas a reconfigurar sus procesos”, cita el documento.
Con la relocalización de empresas mediante el modelo de nearshoring, México se posiciona como un destino atractivo para la inversión extranjera directa.
Este modelo busca evitar las interrupciones en las cadenas de suministro y optimizar las operaciones de las empresas, relocalizando parte de su producción en destinos cercanos a sus mercados principales.
“Se han identificado sectores clave de la industria exportadora con el potencial de recibir estímulos fiscales, con el objetivo de maximizar las ventajas competitivas que nuestro país ofrece”, señala el decreto. Entre estos sectores clave se destacan las industrias de semiconductores, automotriz, eléctrica y electrónica, dispositivos médicos y farmacéuticos, agroindustria y alimentación humana y animal.
El sector cinematográfico y audiovisual también se incluye dentro de los sectores clave, reconociendo la posición geográfica privilegiada de México.
Con este decreto, se busca “promover la exportación de la industria creativa, la cual tiene un alto potencial para consolidar el reconocimiento de México como líder de Latinoamérica en producciones audiovisuales”.
El secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Eduardo Ramírez de la O, respaldó la decisión, argumentando que la deducción inmediata de inversiones es una herramienta fiscal que impulsa la inversión, la competitividad y la generación de empleos, beneficiando el bienestar de la población.
El estímulo fiscal será aplicable para inversiones realizadas desde la entrada en vigor del decreto hasta el ejercicio fiscal de 2024. Además, con el objetivo de fortalecer el desarrollo técnico y tecnológico de la industria, se otorgará una deducción adicional del 25 por ciento en capacitación durante los ejercicios fiscales del 2023 al 2025.