Una llamada reveló el control que tenía Ovidio Guzmán en Culiacán, cuando fue detenido la primera vez en 2019, tras la llegada de militares y GN hasta uno de sus domicilios el capo se entregó, pero también llamó a “Los Chapitos” y al cártel de Sinaloa a detener el ataque contra la SEDENA.
Ovidio Guzmán ha sido detenido por las autoridades en dos ocasiones, en ambas se ha manifestado un gran operativo por parte de las autoridades federales, sin embargo fue en la segunda donde se pudo lograr con éxito la detención.
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En octubre del 2019 Guzmán López se encontraba en el fraccionamiento Tres Ríos en Culiacán Sinaloa, cuando llegaron elementos del ejército mexicano y Guardia Nacional para detenerlo, en dicho operativo gatilleros respondieron con violencia.
Culiacán y otras comunidades de Sinaloa se vieron amenazadas por el Cártel de Sinaloa ante la detención de Ovidio, los delincuentes amenazaron con soltarlo o tomarían represalias contra inocentes. Se tomó la decisión de dejarlo ir para detener la violencia.
El 5 de enero del 2023 nuevamente se localizó la ubicación de Ovidio Guzmán López, los gatilleros del narcotraficante atacaron nuevamente a las fuerzas federales, la reacción tardía de los civiles armados no impidieron la detención de su líder.
En el ataque de los delincuentes para ‘salvar’ a Ovidio poco pudieron hacer pues ya no contaron con el apoyo del Cártel de Sinaloa por lo que hubo decenas de bajas al grupo de “Los Chapitos”.
Ovidio Guzmán no pudo hacer su última llamada en su segunda detención
A diferencia de la primera detención de Ovidio, en la segunda el capo no pudo solicitar apoyo para no ser detenido, la primera vez incluso habló para controlar a sus gatilleros y a miembros del Cártel de Sinaloa.
En 2019 con su celular llamó para pedirle a sus secuaces que detuvieran el ataque contra las fuerzas federales:
Paren todo, ya me entregué, ya paren todo oiga, ya paren todo, ya me entregué.
Con celular en mano, soldados le pedian que hablara para detener los ataques, Ovidio gritó por teléfono.
Ya paren todo, ya tranquilos, ya ni modo.
Se desconoce exactamente a quién llamó Ovidio, pero la primera vez en 2019, quienes atacaban a la SEDENA detuvieron sus disparos.
Actualmente Ovidio continúa con su batalla legal para no ser extraditado hacia Estados Unidos, se espera que las próximas semanas se actualice su estatus en proceso legal, pero continuará en el Altiplano.