Desde 1998, en Estados Unidos han muerto sofocados por el calor 1025 niños al ser dejados por descuido o negligencia encerrados en vehículos. El Departamento de Transporte de Texas inició una campaña preventiva.
Utilizando las pizarras electrónicas en las carreteras y caminos, la agencia advierte a los automovilistas que no deben dejar a niños encerrados en los vehículos porque esto puede resultar muy peligroso y hasta mortal.
Un estudio reciente de la organización NoHeatStroke.org determinó que la edad de los niños que han muerto por insolación vehicular en los Estados Unidos (1998-2024) oscila entre los 5 días y los 14 años. Más de la mitad de las muertes (55%) son niños menores de 2 años.
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Solo durante este año ya se registraron 15 muertes en el país por dejar a menores encerrados en vehículos, mientras en todo el 2024 fueron 39 decesos.
Las autoridades recomiendan a los padres de familia jamás dejar a sus hijos encerrados en un vehículo, ni siquiera por un minuto, ya que en el interior del auto se pueden desarrollar temperaturas extremas y mortales en muy poco tiempo.
También se recomienda echar un vistazo a la parte trasera del vehículo antes de bajarse para evitar olvidar a los niños y dejar a propósito el bolso o maletín en la parte de atrás para tener que voltear al llegar a su destino.
Otra recomendación muy importante es dejar las llaves del vehículo lejos del alcance de los niños para evitar que ellos entren a los autos.
Un análisis de los informes de los medios de comunicación sobre las 968 muertes pediátricas por golpe de calor vehicular durante un período de 26 años (1998 a 2024) muestra las siguientes circunstancias:
- 52.2% - Olvidado por el cuidador (505 niños)
- 24.5% - Obtuvo acceso por su cuenta (237)
- 20.7 % - Abandonado a sabiendas por el cuidador (200)
- 2.7% - Desconocido (26)