La batalla en curso sobre el "contenido inapropiado" en las escuelas públicas de Texas re recrudeció el martes cuando la Junta de Educación del Estado se negó a adoptar material educativo de natalidad y educación sexual para las escuelas intermedias y secundarias.
Temas como la anticoncepción, identidad de género y autolesiones en adolescentes quedaron a la deriva.
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Material educativo de natalidad y educación sexual negados
La decisión podría provocar que los distritos escolares se valgan por sí mismos sobre la mejor manera de abordar los nuevos estándares del plan de estudios de salud aprobados hace apenas un año.
En noviembre pasado, la Junta de Educación del Estado aprobó nuevos estándares curriculares, llamados "Conocimientos y Habilidades Esenciales de Texas", o TEKS, que incluían lecciones sobre control de la natalidad, no solo abstinencia para estudiantes de secundaria.
En ese mismo proceso, la junta se negó a incluir estándares que habrían definido y enseñado la identidad de género y la orientación sexual.
Un miembro de la junta, la demócrata de Dallas, Aicha Davis dijo:
“Parece que estamos a punto de dejar a muchos distritos en la oscuridad con esto”.
Los sistemas escolares, los líderes y los órganos electos han estado bajo un mayor escrutinio durante el año pasado, ya que los defensores y electores conservadores avivaron las luchas sobre los materiales de la biblioteca.
Varios miembros de la junta, y una gran parte de los que hablaron el martes, objetaron cómo esos textos presentaban a los estudiantes de sexto a octavo grado temas como la identidad de género, el aborto, la masturbación y temas de sexualidad.
Durante el testimonio público, Mary Elizabeth Castle, asesora senior de políticas de la organización sin fines de lucro de valores familiares "Texas Values", dijo que los materiales de Lessonbee Inc. y Human Kinetics iban más allá del alcance de los cambios de TEKS:
“Fomentan la actividad sexual a una edad temprana; mencionaron el consentimiento cuando acordamos las habilidades de rechazo en los TEKS. Y luego tuvieron un tema de identidad de género y orientación sexual que no fue acordado por la junta ”.
La junta aprobó solo un conjunto de materiales, con una votación de 7-6: productos de educación para la salud para estudiantes de K-5 de la editorial QuaverEd. Esos materiales no abordaron ninguno de los estándares de educación sexual, sino que se centraron en elementos como la salud mental, la higiene y la toma de decisiones responsables.
Sin embargo, varios de los que hablaron en testimonio público se opusieron a la naturaleza en línea del material aprobado. A algunos les preocupaba que se hiciera un seguimiento de los estudiantes utilizando estos datos.
Otros dijeron que trabajar en colaboración con otros estudiantes en conceptos tan sensibles como la salud mental conduciría al acoso escolar.
Pat Hardy, republicano de Fort Worth, votó en contra de todos los materiales de secundaria y dijo que "no eran apropiados tal como están ahora".
Pero insinuó que podría cambiar de opinión sobre los materiales de Goodheart-Wilcox si los editores cambiaran el contenido para indicar una preferencia por la abstinencia sobre el control de la natalidad.
Will Hickman, republicano por Houston, fue uno de los pocos votantes indecisos que ofreció un apoyo tibio al contenido de QuaverEd y Goodheart-Wilcox.
"No creo que debamos tener un vacío en el que no adoptemos nada". Estos, de nuevo, no son perfectos, pero creo que son buenos. Y como hemos dicho muchas veces, los distritos escolares pueden adoptarlos o no, pero solo ofrecen una opción ".
Los distritos escolares son libres de seleccionar qué materiales utilizan. Mientras Hardy y otros sugirieron que los distritos podrían crear su propio plan de estudios basado en los TEKS, Davis, de Dallas, dijo que muchos distritos más pequeños carecerían del personal para realizar tal tarea.
En Texas, los distritos escolares no están obligados a enseñar educación sexual en los cursos de salud. Las clases de salud se eliminaron como requisito para graduarse de la escuela secundaria en 2009.
Los distritos escolares pueden ofrecer instrucción en educación sexual, después de consultar con un comité asesor de salud Texas tiene una de las tasas de embarazo adolescente más altas del país, con aproximadamente 24 de cada 1,000 niñas de entre 15 y 19 años.