Al menos tres muertos se reportan tras el tiroteo en una oficina del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Dallas, Texas, además de varios heridos.
El sospechoso (quien se disparó a sí mismo), abrió fuego contra las instalaciones de ICE, al noreste de Dallas, desde un edificio vecino, informó Tricia McLaughlin, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
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Los fallecidos serían migrantes que se encontraban detenidos, expresó la portavoz, quien aseguró que ningún agente se encontraba en peligro. "Parece haber sido un francotirador", indicó McLaughlin, aunque la investigación aún se encuentra en desarrollo.
Las víctimas
Aunque se desconoce el motivo específico del ataque, el Gobierno de Donald Trump, además del vicepresidente, JD Vance, lo han vinculado a un intento de atentar contra las fueras del orden en Estados Unidos.
"El ataque obsesivo contra las fuerzas del orden, en particular contra ICE, debe parar", indicó el republicano en su plataforma de la cuenta X.
No es el primer caso
Apenas el pasado 4 de julio, un grupo de hombres armados atacó el Centro de Detención de Prairieland, cerca de Fort Worth, en lo que las autoridades describieron como un ataque coordinado que dejó a un agente herido, que a pesar de la grave herida logró sobrevivir.
Días después, oficinas de la Patrulla Fronteriza en McAllen recibieron disparos de un hombre de 27 años con un rifle. Dos empleados resultaron con heridas.