En un estado conocido por sus pueblos de nombres peculiares como "Dime Box" o "Notrees", hay uno que se lleva la corona por tener el nombre más difícil de pronunciar.
Según un reciente estudio de la app de aprendizaje de idiomas Preply, Nacogdoches es oficialmente el nombre de ciudad más difícil de pronunciar en Texas, basado en el análisis de las búsquedas en internet de los estadounidenses.
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Pero detrás de este nombre que parece un trabalenguas, se esconde la que muchos consideran la ciudad más antigua del estado, un rincón lleno de historia y encanto sureño que vale la pena descubrir.
¿Cómo se dice Nacogdoches?
El estudio no solo destacó el problema, sino que también aportó la solución. La pronunciación correcta, según Preply, es:
NAH-coh-DOE-chess (acentuando la primera y la tercera sílaba).
Es interesante notar que esta guía difiere de la sugerencia de Google, que propone una versión como "nah-kuh-DOW-chuhs". Así que la próxima vez que lo intentes, ya tienes la clave para sonar como un local.
Un viaje en el tiempo: La ciudad de las nueve banderas
Más allá de su nombre, Nacogdoches es pura historia. Fundada oficialmente por Don Antonio Gil Y’Barbo en 1779, sus raíces se remontan mucho más atrás, hasta el año 800 d.C., cuando fue habitada por la tribu Caddo (conocida como Nacogdoche).
Su estratégica ubicación la hizo un punto clave a lo largo de la historia, tanto que ha ondeado nueve banderas diferentes de las distintas naciones y gobiernos que han reclamado su territorio, lo que le otorga un patrimonio cultural único.
¿Qué hacer en la ciudad con el nombre más difícil?
Ubicada a poco más de dos horas de Houston, Nacogdoches es un destino perfecto para una escapada. Estos son algunos de sus imperdibles:
- Millard’s Crossing Historic Village: Un museo viviente que te transporta al pasado con edificios restaurados y exposiciones interactivas.
- Centro Histórico: Calles empedradas de ladrillo rojo repletas de arquitectura histórica, tiendas boutique y acogedores cafés.
- Ray M. Mize Azalea Garden: Un oasis de paz y color con vibrantes azaleas, camelias y arces japoneses, ideal para un paseo tranquilo.
Así que, si logras dominar su nombre, Nacogdoches te recompensará con una experiencia llena de historia, naturaleza y auténtico encanto texano.