En un sorprendente incidente ocurrido en Hangzhou, China, una camioneta salió de control y se estrelló contra una barrera de seguridad en una vía. Lo curioso de este accidente no fue solo el choque, sino el hecho de que el conductor del vehículo nunca estuvo presente en el momento del impacto.
Un testigo, al ver el accidente, pensó que el conductor había sufrido un percance y corrió al vehículo para ayudar. Sin embargo, al abrir la puerta, se llevó una gran sorpresa al descubrir que no había ninguna persona dentro del automóvil.
En lugar de un ser humano, lo que salió disparado del vehículo fue un perro que, al parecer, había estado dentro del automóvil y saltó a la calle, huyendo rápidamente del lugar del accidente.
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Afortunadamente, el incidente no causó heridas, ya que el vehículo solo recorrió una corta distancia y a baja velocidad. Después de que el perro se alejara del lugar, el propietario del vehículo llegó y explicó lo sucedido. Según él, se había olvidado de apagar el motor de la camioneta antes de alejarse.
Esto permitió que el perro, al moverse dentro del vehículo, accidentalmente activara el encendido, lo que hizo que el coche comenzara a moverse por sí solo.
Este curioso incidente resalta cómo, a veces, la negligencia o un simple olvido puede llevar a situaciones inesperadas. A pesar de lo inusual de la situación, no hubo víctimas y el perro fue encontrado sano y salvo. El dueño del vehículo, por su parte, se mostró aliviado al saber que no había ocurrido ninguna tragedia, aunque sin duda este será un episodio que recordará por mucho tiempo.