En lo que va del año, el gobierno estadounidense ha cancelado más de 80 mil visas, incluidas las de al menos 8 mil estudiantes, según reveló un portavoz del Departamento de Estado a la agencia noticiosa EFE.
De acuerdo con lo revelado por el funcionario estadounidense, de las visas canceladas, 16 mil tuvieron como razonamiento o motivo, conducir bajo los influjos del alcohol, 12 mil por agresiones y 8 mil por robos, entre las principales.
Todo esto ha ocurrido en el marco de los primeros meses de la nueva Administración Trump, que desde su llegada, el 20 de enero de este año, ha sido tajante en su postura de perseguir la migración, que ha resultado en redadas, detenciones controversiales, luego de eliminar los programas de gobiernos anteriores, como el Estatus de Protección Temporal (TPS) o el permiso humanitario, situaciones que han motivado protestas masivas en más de una ocasión a lo largo y ancho de la Unión Americana.
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Mientras que en México algunos políticos y personajes públicos han visto sus visas revocadas por diversas razones, el gobierno estadounidense ha puesto atención a las opiniones vertidas en redes sociales, denegando permisos de residencia y visas si encuentra contenido que considere crítico con Israel, además de que el mes pasado, el Departamento de Estado anunció que canceló el visado a seis personas -cuatro de estas latinoamericanas- por criticar al activista ultraconservador Charlie Kirk, quien fue asesinado en septiembre.
Bajan cruces
Aunado a lo anterior, el Sistema de Puentes de Laredo cerró el año fiscal 2024-2025 con una baja de casi un millón de dólares en los ingresos por cruces de vehículos y de personas a México. Con relación al presupuesto, las autoridades municipales habían proyectado ingresos por 88 millones 180 mil 685 dólares, por lo que hubo una diferencia de 5.1 millones y una baja del 5.8 por ciento.
Menos tramites
En Nuevo Laredo, la Oficina Municipal de Enlace con la Secretaría de Relaciones Exteriores tramitaba diariamente hasta 100 pasaportes diarios -que era la totalidad de sus citas disponibles-, mientras que el miércoles, apenas acudieron 20 personas con interés de obtener el documento, lo que representa su nivel más bajo en años; situación que tramitadores externos de visas estadounidenses, atribuyen a las políticas de la Administración Trump.
Laura Rangel, encargada de un negocio en Nuevo Laredo dedicado a asistir de manera externa en los trámites de visas, señaló que el número de servicios que ellos realizan ha disminuido hasta en un 90 por ciento, debido al temor de un incremento en el precio del documento, las políticas implementadas por el presidente de Estados Unidos, e incluso el desconocimiento y confusión que se crea en redes sociales sobre el tema, con publicaciones que aseguran que todas las visas se están negando.
“La gente tiene miedo por los precios, por el alza y porque no los van a dejar cruzar, y porque de cada 10 visas niegan todas y no es verdad, siguen autorizando”, aseguró Rangel.
Luego de la reforma presupuestaria “One big beautiful bill”, traducida en “una ley grande y hermosa” (HR-1) firmada en julio, se autorizó un ajuste significativo en el costo de la visa tipo B-1/B-2, destinada a turismo y negocios, pues a la tarifa de solicitud de 185 dólares, se ha incorporado una Cuota de Integridad de Visa de 250 dólares, lo que eleva el costo final a 435 dólares por solicitante, aunque no ha entrado en vigor aún.
