Es un hecho, con los años, nuestro cuerpo cambia, y uno de los efectos más curiosos y poco comentados del envejecimiento es que muchas personas comienzan a perder estatura. Aunque a simple vista parezca algo menor, este fenómeno puede revelar alteraciones en los huesos, músculos y postura que merecen atención médica, así lo explica el doctor Carlos Suárez-Ahedo.
La pérdida de masa muscular hacen que la columna se venza ligeramente hacia un lado o hacia adelante. Perdemos esta posición ergonómica, nos vamos enchuecando y así vamos perdiendo centímetros conforme avanzamos en edad.
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Según el experto, este proceso suele comenzar a partir de los 40 años, y afecta más a las mujeres, ya que están más expuestas a cambios metabólicos y hormonales, como la osteoporosis, que debilita los huesos y favorece microfracturas en la columna.
Entre las principales causas de la pérdida de estatura se encuentran
- Deshidratación de los discos intervertebrales, que son los “colchoncitos” entre las vértebras y que se van desgastando con el tiempo
- Deformidades posturales, como la curvatura lateral de la columna (escoliosis) o el encorvamiento progresivo
- Enfermedades óseas, especialmente la osteoporosis, que puede generar microfracturas en los cuerpos vertebrales y provocar la clásica “jorobita” en la espalda
Estos factores, combinados con una mala postura y una alimentación deficiente, aumentan el riesgo de perder altura con los años.
Aun así, hay formas de prevenirlo
El doctor Suárez-Ahedo recomienda mantener una vida activa y cuidar la salud ósea.
Las mujeres deben hacerse densitometrías óseas al llegar a la menopausia, para detectar a tiempo si hay pérdida de masa ósea. Pero lo más importante, y lo más fácil, es hacer ejercicio regularmente, especialmente de fuerza en la zona lumbar y abdominal
Además, adoptar una postura correcta al caminar y al estar sentado puede marcar la diferencia. “Mantener la espalda recta y fortalecer el core ayuda a conservar la estructura del cuerpo, prevenir dolores y evitar perder centímetros”, concluye el especialista.
Con estos hábitos, no se puede detener el paso del tiempo, pero sí se puede envejecer con una espalda fuerte, una postura firme y sin perder estatura.