En Texas, los conductores deben cumplir con ciertos requisitos para mantener activa su licencia de conducir, y uno de los más importantes es estar al corriente con los pagos de manutención infantil.
Según el capítulo 232 del Código Familiar estatal, si un padre adeuda una cantidad igual o mayor que tres meses de manutención, un tribunal puede emitir una orden para suspender su licencia de conducir.
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Además de la suspensión de la licencia, no cumplir con la manutención infantil en Texas puede llevar a consecuencias graves, como una condena de prisión de seis meses a dos años, junto con una multa de hasta 10,000 dólares.
La persona también podría aparecer en la página web del Fiscal General de Texas y enfrentarse a otras medidas como la retención de ingresos, embargo de propiedades y cuentas bancarias, e incluso la pérdida de su pasaporte.
Si un padre no cumple con sus pagos de manutención, también podría perder otras licencias, como la profesional o de caza, y enfrentar la interceptación de devoluciones de impuestos o premios de lotería.
La ley texana es rigurosa en cuanto a la obligación de pagar la manutención, incluso si el padre se declara en quiebra, aunque en ese caso se puede solicitar una modificación del monto en función de los ingresos.
El Departamento de Seguridad Pública de Texas también tiene la facultad de suspender una licencia de conducir en otros casos, como el incumplimiento de la renovación anual o la necesidad de un dispositivo de bloqueo del encendido.
Es esencial que los conductores en Texas se mantengan al día con sus responsabilidades de manutención infantil para evitar consecuencias legales y financieras graves que puedan afectar su movilidad y estabilidad.