A pocos días de las elecciones generales en Estados Unidos, la votación anticipada ha alcanzado cifras sin precedentes, con más de 14 millones de ciudadanos que ya han emitido su voto, ya sea por correo o de manera presencial.
Este nivel de participación subraya la intensidad de la competencia entre el expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris, cuya contienda refleja la profunda polarización política que atraviesa el país.
Cifras récord en elecciones anticipadas
En particular, estados clave como Wisconsin, Pensilvania, Florida, Michigan y Arizona se perfilan como determinantes para el desenlace de las elecciones. La pugna entre Trump y Harris no solo moviliza a los votantes tradicionales de ambos partidos, sino que también pone en el centro de la escena a sectores del electorado, como el latino, que en elecciones anteriores han sido decisivos.
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Estados que aceptan el voto anticipado
- Alaska
- Arizona
- Arkansas
- California
- Colorado
- Washington
- Virginia
- Texas
- Pensilvania
- Carolina del Norte
- Nueva York
- Kansas
- Illinois
Solo Alabama, Misisipi y New Hampshire no cuentan con esta opción en persona, aunque ofrecen alternativas para votantes ausentes que cumplan con los requisitos requeridos.
En esta elección, temas sensibles como el derecho al aborto, las políticas migratorias y la economía podrían influir notablemente en el voto de los estadounidenses.
La votación anticipada, que ya fue ampliamente utilizada en 2020 debido a la pandemia, se ha afianzado como un método preferido por millones de votantes, a pesar de las críticas que recibió de Trump en el pasado.
El expresidente llegó a politizar este tipo de votación, argumentando que podía favorecer el fraude. Sin embargo, tanto demócratas como republicanos han adoptado en mayor medida esta práctica, y su implementación varía significativamente entre los estados.
Algunos permiten que los ciudadanos emitan su voto hasta 50 días antes de la jornada electoral, mientras que otros inician el proceso apenas unos días antes del 5 de noviembre.
Números cerrados
La carrera entre Harris y Trump es extremadamente cerrada. Las encuestas más recientes muestran a ambos candidatos prácticamente empatados, con solo un ligero margen que favorece a la vicepresidenta.
Con el día de la elección acercándose rápidamente, el resultado final dependerá de los votantes de los llamados "swing states", donde ambos contendientes están enfocando sus últimos esfuerzos.