El caso de los hermanos Menendez volvió a tomar relevancia nuevamente gracias a la serie de Netflix que habla de su historia. Ahora, familiares de los condenados a cadena perpetua piden su liberación, argumentando como eran niños violentados cuando todo ocurrió.
Los primos, tíos, amigos, entre otros seres queridos de los dos hermanos se pronunciaron frente a un tribunal en Los Ángeles para pedir una revisión al caso y su posible liberación.
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De acuerdo con los interesados, alegaron que Erik y Lyne Menendez fueron maltratados por su padre y dicha situación fue narrada en un momento social que no estaba preparado para aceptar que los hombres también pueden ser abusados.
Anna Maria Baralt, sobrina de José Menendez, afirmó como se trataba de un delito machista, pues 'si fueran las hermanas Menéndez, no estarían detenidas'.
“Si el caso fuera evaluado hoy, con el conocimiento que tenemos ahora sobre el abuso y el trastorno por estrés postraumático, no tengo dudas de que la sentencia hubiera sido diferente”, aseguró Anna Maria Menendez.
Joan Anderson VanderMolen, hermana de Kitty Menendez, también defendió a sus sobrinos y reconoció los maltratos que tuvieron que vivir y las consecuencias que los llevaron a ejecutar a sus padres.
A esta moción se unió Brian Anderson Jr, primo de los hermanos, agregando que los conoce de toda la vida y puede asegurar que 'no son los villanos que nos han presentado'.
"Eran solo niños que fueron brutalizados de las formas más horribles. Ellos se han convertido en mejores hombres a pesar de todo lo que tuvieron que vivir”, dijo la mujer de 92 años.
Caso hermanos Menéndez
El 20 de agosto de 1989, Jose y Kitty Menendez fueron encontrados asesinados en su mansión. Inicialmente, los investigadores consideraron un ajuste de cuentas y la posible implicación de la mafia. Fueron sus propios hijos, entonces de 21 y 18 años, quienes llamaron a la policía al descubrir los cuerpos.
Sin embargo, en marzo de 1990, fueron arrestados y acusados de asesinato en primer grado. Durante el juicio, los hermanos Menendez alegaron que habían sido víctimas de abuso físico y sexual por parte de su padre a lo largo de su infancia, y que el asesinato fue un acto de defensa.