Ciertos ciudadanos una vez establecidos legalmente en Estados Unidos buscan adquirir la ciudadanía. La naturalización conlleva derechos y obligaciones para las personas interesadas. Aunque parezca un proceso inamovible, lo cierto es que hay una serie de razones por las que el gobierno estadounidense puede revocar la ciudadanía e incluso deportar al portador. Estas son algunas de las razones por las que puedes perder el estatuto:
- Naturalización de forma ilegal: Es una de las más obvias. Si no se encuentran registros oficiales sobre la obtención de la ciudadanía, los oficiales no dudarán en invalidar el documento. Por otro lado, mentir durante el proceso también es castigado con la misma acción.
- Traición al país: Los estadounidenses no dudarán en revocar la naturalización si se suma al ejército de otro país u ocupa un cargo político importante.
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- Deshonra de las fuerzas armadas: Una manera de poder ser ciudadano americano es a través de unirse a la milicia. No obstante, si eres dado de baja, la licencia de residencia no tardará en vencer.
- Negarse a testificar ante el Congreso: Ningún ciudadano puede evitar una declaración oficial; de hacerlo un ciudadano naturalizado, su naturalización perderá vigor a la brevedad.
- Ser miembro de algún grupo criminal o extremista: Las autoridades en Estados Unidos prestan especial atención a este punto. Si durante una investigación es descubierto un nexo con una cédula criminal o extremista, no sólo perderá su ciudadanía, sino que enfrentará cargos ante la ley.
Por otro lado, en casos de menor concurrencia, también se puede renunciar voluntariamente a ser considerado estadounidense. Las razones son variadas, pero las que más resaltan es que dejaron de sentirse identificados así o buscan hogar en otra nación. De renunciar, puede haber consecuencias como no tener nacionalidad e incluso te pueden negar la visa en el futuro.